El papa Francisco hizo un llamado este domingo a seguir rezando por Valencia y otros pueblos de España que están sufriendo en estos días. Durante su Ángelus en la Plaza San Pedro, en el Vaticano, planteó una reflexión a los fieles: “¿Qué hago yo por la gente de Valencia? ¿Rezo, ofrezco algo? Piensen en esta pregunta”. Sus comentarios llegaron en un momento en que las imágenes de la devastación causada por la depresión aislada en niveles altos (DANA) en el este de España comenzaban a difundirse a nivel mundial.
“Hablando de estas catástrofes medioambientales, recemos por la población de la península ibérica, especialmente por la Comunidad Valenciana, que ha sido duramente golpeada por la DANA. Oremos por los difuntos, por sus seres queridos y por todas las familias que han sufrido daños. Que el Señor sostenga a quienes están sufriendo y a quienes brindan ayuda”, manifestó el Papa.
Además, el sábado, Francisco envió un videomensaje de solidaridad al presidente de la Conferencia Episcopal, Luis Argüello, en el que expresó su cercanía con la gente de Valencia. “Querido hermano, quiero que transmitas mi apoyo a la gente de Valencia. Estoy con ellos en este momento de catástrofe y rezo por ellos. Que Dios los bendiga a todos”, dijo. El Papa también destacó el esfuerzo de miles de voluntarios que se han movilizado para brindar ayuda humanitaria a las zonas afectadas.
Por otro lado, el rey Felipe VI de España, acompañado por su esposa Letizia, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el president de la Generalitat, Carlos Mazón, visitó la ciudad de Paiporta, una de las más golpeadas por la DANA. Durante su llegada, parte de la multitud les recibió con insultos y algunos incluso les arrojaron barro. Debido a los disturbios, la visita tuvo que ser cancelada.
“¡Asesinos!”, “¡Fuera!”, “¡Ayuda!” fueron algunos de los gritos que resonaron entre los presentes mientras el grupo se acercaba a la zona afectada. La tensión aumentó y, en medio de empujones, la comitiva se vio dividida. El Rey y Mazón quedaron separados del resto, y tras dialogar brevemente con algunos vecinos y miembros del personal de emergencia, se retiraron en coches oficiales, que fueron objeto de lanzamientos de piedras, botellas y barro.
Antes de esta visita, la Casa Real había emitido un comunicado agradeciendo a los líderes internacionales por sus mensajes de condolencia y apoyo ante las devastadoras consecuencias de la DANA, señalando que “sus palabras de afecto y hermandad nos hacen sentir acompañados en esta terrible tragedia que asola nuestro país”. (Con información de C5N)