Aunque muchas de las miradas del domingo estuvieron depositadas en las presentaciones de tres grandes del fútbol argentino (Independiente recibía a Sarmiento y River a Quilmes, mientras que Boca visitaba a Temperley), en Santa Fe había otro atractivo particular. Se trataba del estreno de local del convulsionado Colón, que había echado a Reinaldo Merlo apenas transcurrida una fecha del multitudinario nuevo torneo local.
Y para el 'Sabalero' pareció no ser un mero formalismo el dicho que asegura que las salidas de los técnicos suele descomprimir. Es que el local salió decidido a llevarse por delante a un Argentinos que nunca encontró la forma de reaccionar y se mostraba carente de ideas. Mientras Lucas Alario desperdiciaba las primeras peligrosas ocasiones, fue el apuntado David Ramírez (criticó públicamente a 'Mostaza' luego de perder en el debut con San Lorenzo) quien logró materializar la superioridad: en una contra que encontró muy mal parado al 'Bicho', el 'Magro' decretó el 1-0 con el que los santafesinos se irían al descanso.
Aunque Colón había sido ampliamente superior a su rival de turno, no supo cerrarlo a tiempo y terminaría pagando demasiado caro el exagerado desgaste físico que realizó en la etapa inicial. Habiéndose quedado casi sin piernas, Néstor Gorosito intentó buscar respuestas en su banco y la encontró: hizo debutar al pibe Jonathan Rodríguez, que le retribuyó la confianza decretando la igualdad a tan sólo cinco minutos del final.
Mientras el local se quedó con un sabor amargo porque vio cómo se le escaparon dos puntos sobre el final, los de La Paternal terminaron celebrando una importante unidad, teniendo en cuenta la flojo performance demostrada.