De perfil bajo, al punto tal que le escapa a las entrevistas, Milton Casco, considerado como una persona de palabra y fanática de criar caballos, se convirtió hoy en la gran sorpresa de los 23 convocados de la Selección argentina para la Copa América de Brasil.
Con 31 años, este lateral izquierdo que también puede jugar por derecha, disputará su segunda Copa América ya que había sido citado por Gerardo Martino para Chile 2015, donde no jugó ni un minuto.
Nacido en María Grande, es hijo de una familia trabajadora en la que el padre se desempeña como policía y la madre, como ama de casa.
Eduardo Palomar, su representante, definió al futbolista como "alguien fuerte de la cabeza, que tiene mucha palabra y muy tranquilo".
"Mirá si tendrá palabra que trabajo con él desde que estaba en la pensión de Gimnasia y Esgrima La Plata y nunca firmamos un contrato. Lo llamo dos veces al año, nos juntamos para tomar un café. Y de trabajo sólo hablamos cuando hay que renovar algún contrato o surge alguna posible operación", dijo.
Palomar contó que Casco es una "persona muy sencilla, que le gusta criar caballos, comer asados en familia y tomar mate".
Casado y con dos hijos varones, Casco supo sobreponerse a los silbidos de la platea de River y hoy es una futbolista importante para el entrenador Marcelo Gallardo.
"Él es fuerte de la cabeza. Te cuento lo que pasó cuando lo operaron de la clavícula este año. La intervención duró tres horas. Y nos explicaron que seguramente iba a tener mareos y vómitos y por eso le iban a dar una medicación especial. Cuando se despertó, le dijo a la doctora que no era necesario ese suministro y que se iba a dormir y despertar al día siguiente como si nada. Y terminó ocurriendo", graficó Palomar.
Casco debutó en primera división en Gimnasia y en 2012 fue adquirido por Newell's, donde un año después fue campeón en aquel recordado equipo dirigido por Gerardo Martino.
A mediados de 2015, estaba acordada su venta desde el equipo rosarino al Olympique de Marsella, que era dirigido por Marcelo Bielsa, reconocido hincha de la Lepra.
Sin embargo, el Loco tuvo una salida abrupta cuando Milton ya tenía los pasajes para viajar a Francia y su pase terminó por no concretarse.
Un mes después, fue transferido a un River cuyo titular era Leonel Vangioni para ser una alternativa, pero terminó por ocupar su lugar cuando este se marchó al Milan.
Sin embargo, no tuvo buenas actuaciones y Gallardo terminó por fichar al uruguayo Marcelo Saracchi, quien otra vez lo relegó al banco de suplentes.
Cuando el charrúa fue transferido al Leipzig, el entrenador le devolvió la titularidad y él le retribuyó la confianza con buenos rendimientos que lo depositaron en la Copa América.