Lo absurdo se vuelve posible. Mientras la 4ª Fecha comenzaba a tomar el rumbo pautado inicialmente, la AFA decidía sobre los compromisos que deben completarla en su totalidad. Belgrano y Gimnasia ya estaban en el campo de juego del Mario Alberto Kempes de Córdoba y, como si a nadie le importara, los directivos de nuestro fútbol se reunían en Viamonte resolviendo sobre la "igualdad en las condiciones de competitividad". Pero claro, un término que, al parecer, sólo era aplicable para Boca y River; hecho que hizo 'explotar' la bronca de todo el resto de los dirigentes y decantó que todas las decisiones den marcha atrás para jugar la fecha con normalidad.
Sin Julio Humberto Grondona, la AFA quedó en manos de Luis Segura que debe hacer malabares para soportar la presión de los clubes grandes. Tras confirmarse el Paro Nacional del jueves, el cual fue fogoneado por el hombre de los camioneros, Hugo Moyano, quien además es Presidente de Independiente, se debieron suspender los compromisos que se iban a disputar ese día. Así fue que, en primera instancia, Banfield-Tigre, Vélez-Lanús y Quilmes-San Lorenzo fueron reprogramados.
El Boca de Bianchi, rival del Fortín el fin de semana, puso el grito en el cielo porque su contrincante llegaría con ocho días de descanso a dicho encuentro y ellos con sólo cuatro. Por tal motivo, decidieron elevar un pedido formal para que su cotejo ante Estudiantes de mañana sea suspendido.
Primero se pensó en llegar a un acuerdo con los dirigentes de UTEDyC y jugar los duelos del jueves a puertas cerradas para no sufrir quejas, pero esa posibilidad, en principio, se echó por tierra tras una reunión en Casa de Gobierno con políticos de las altas esferas del Gobierno Nacional.
Pocas horas después, la AFA sacó un comunicado donde aclaró que quedan suspendidos los partidos del jueves porque UTEDyC se adhiere al paro y que tampoco se realizarían los cotejos de Boca (contra Estudiantes) y River (ante Defensa y Justicia) "para sostener la igualdad en las condiciones de competitividad habida cuenta de los compromisos inmediatos que deberán afrontar los cuatro equipos con otros rivales". Hasta ahí, un papelón.
Pero no terminó ahí, porque Rodolfo D'Onofrio, Presidente de River, salió rápidamente a los medios a dejar su postura, llamativamente contraria a la decisión que se tomó en la AFA. "River no pidió suspender y nunca fuimos consultados, es un paso atrás de la AFA", sentenció, visiblemente enojado, el mandatario.
Boca se cortó solo
¿Qué es lo que habría sucedido? Juan Carlos Crespi, por pedido de Carlos Bianchi y con el aval de Daniel Angelici, habría iniciado con Luis Segura las gestiones para que el Xeneize no tenga acción ante el "Pincha". Sin consultarle a los directivos del Millonario, habrían optado por sumar a la demanda al equipo de Marcelo Gallardo, dando por hecho que estarían de acuerdo. Pero desde Núñez se sorprendieron por esta situación y salieron a atacar la medida. "Boca lo suspende con el aval de River. Y ahora nos enteramos que River no dio el aval. Esto nos supera", sustentó esta versión el dirigente de Quilmes Carlos Coloma en el programa partidario local Ilusión de Primera.
Pero hay más tela para cortar y no todo termina ahí: Rosario Central y Newell's, equipos que enfrentarán el fin de semana, por la 5ª Fecha, a los 'descansados' Defensa y Justicia y Estudiantes, con la "igualdad en competiciones deportivas" como aliada, también elevaron un pedido a la AFA para que se posterguen sus cotejos de mañana y recibieron una respuesta afirmativa, por lo que: Central-Godoy Cruz y Atlético de Rafaela-Newell's que se deberían jugar mañana a las 17 están suspendidos.
Todo marcha atrás
Mientras Independiente inicia su encuentro en Bahía Blanca ante Olimpo y disputa el segundo cotejo de la jornada, Luis Segura, Miguel Silva, José Lemme y Pablo Paladino, hombre fuerte del Fútbol Para Todos, están reunidos en estos momentos intentando reflotar todos los encuentros del miércoles y así terminar con el caos generalizado que comenzó con el pedido de Boca.
Igualmente, la situación sería difícil de truncar, ya que el Xeneize, por ejemplo, no hizo el entrenamiento de fútbol formal que tenía pautado para hoy y desconcentró a todos sus futbolistas, dando una sobrada muestra de que su intención no es la de jugar.