Hubo emoción, porque Luifa recibió la visita de su hijita Lola. Tensión, porque quedaron nominados todos, menos Patricio. Decepción, porque entre Yamila y Matías S. se fue él. Una inédita negociación entre Ivana y Mauricio. Y, como si todo esto fuera poco, Ria denunció "un complot". Todo eso pasó en Gran Hermano
"Para que quede claro, chicos, uno de los dos hoy la abandona", dijo Rial en un momento de la noche, aumentando la tensión de una nueva gala. Se dijo, la cosa estaba entre Yamila o Matías S.: la gente definía con su voto. "Muy parejo de verdad", anunció Rial en cuanto se asomó al sobre. "El que se vaya fue un gran jugador, en serio", aduló. "Debe abandonar la casa por decisión de la gente es. . . Matías S".
Otro momento clave fue La Negociación, así, con mayúsculas. Mauricio e Ivana Icardi debieron decidir, en apenas 5 minutos, quién iba a placa y quién quedaba inmune. Y como no se pusieron de acuerdo, fueron ellos los que quedaron estampados en placa.
A la hora del Fulminante, Gabriel mandó al muere primero a Luifa, después a Pato. Belén, igual. Pasó Gabriel y dijo: Luifa y Pato. Belén: lo mismo. Matías ("Hola Bro") Pato y Luifa (y van...). Barbará, el mismo camino. Leandro, el Tucu, empezó por Luifa y siguió con Patricio. En cambio Mauricio optó por Ainelén y Bárbara. El cascoteado Luifa, idem. Y cerró Ivana, mandando al muere -cómo no- a Luifa y a Pato. Quedaba así de manifiesto, según Rial, "el complot más burdo de la historia del juego".
Y resumió: "Están todos nominados menos Patricio".
Antes de todo eso se había producido, sin dudas, el momento más emotivo de la gala. Por fin, Luifa se reencontró con su hijita Lola. Padre e hija hacía 93 días que no se veían: los 63 de confinamiento hermanado, más el mes previo, "que no la vi por una pelea con la madre", explicó Luifa, quebrándose hasta las lágrimas.