Rocío se tomó el vuelo de Emirates el martes por la noche para llegar a Dubai y reencontrarse con Diego.
"Vení, te necesito acá conmigo", le dijo el Astro por teléfono y ella terminó cediendo.
Cuando a fines de julio Diego Maradona viajó solo rumbo a Dubai, muchos empezaron a conjeturar sobre una ruptura en la relación con Rocío Oliva, en ese momento el Diario Popular contó que solo se trataba de un impasse, de un tiempo que necesitaban ambos y sobre todo Rocío, quien había sufrido varias discusiones con el Diez por sus visitas a Verónica Ojeda.
La separación sólo era un escarmiento que Rocío le quería dar a Diego por los celos del astro consideraba el matutino.
Los días en la Argentina de Rocío transcurrieron muy tranquilos, salió con amigas de noche y compartió momentos con su hermano, con quien tiene una excelente relación.
Pero el amor entre Diego y Rocío nunca se terminó, sino todo lo contrario.
Ese aire que tomaron les sirvió para sentir que se necesitaban y desde este miércoles están otra vez juntos en Dubai.
La pelea entre ellos comenzó cuando después de una visita que hizo Diego a la casa de Ezeiza, donde compartió la tarde con su hijo y Verónica, le recriminó por algunas fotos que había visto.
Al parecer, Verónica le mostró imágenes de ella con Omar Suárez y Diego se enfureció pensando en una traición.
"Es siempre lo mismo, ya me cansa", dijo Rocío cuando la consultaron los motivos de su negativa a viajar a Dubai.
"Es una separación, tuvimos tantas que no se sabe. Estoy sola, tranquila y bien", explicó al programa AM en ese momento.
Ahora queda demostrado que esos dichos y la información del Diario Popular eran ciertas y lo que mucho se habló sobre una ruptura definitiva no fue más que un escarmiento que Rocío le quiso dar a Diego.
Maradona sigue entrenando en Dubai en doble turno para prepararse y estar en forma cuando en octubre se juegue el partido por la paz.
Además, tiene varios compromisos en Europa y los Emiratos tratando de definir cual será su postura de cara a las elecciones de FIFA y su apoyo al Príncipe Ali.
Pero más allá de sus ocupaciones lo que quiere Diego es sentir cerca a la mujer de quien está enamorado y por eso cedió, levantó el teléfono y tiró un puente entre Argentina y los Emiratos.