Noelia Marzol abandonó este miércoles el sanatorio Otamendi junto a su pareja, el futbolista Ramiro Arias, y el primer hijo fruto de su relación, Donatello.
Marzol fue madre el domingo 23 de mayo, y al día siguiente compartió la noticia en las redes sociales, donde recibió diversas muestras de afecto. “A las 04.58 horas nació por parto natural el amor de nuestras vidas”, escribió la bailarina, quien compartió con sus seguidores los detalles del parto.
“Nació Doni. Rami ayudó al doctor a sacarlo mientras la partera me enseñaba y contenía. Fue un proceso hermoso de principio a fin. Estoy intensamente agradecida a todos los profesionales que hicieron este momento único. Desde mi obstetra hasta cada uno de los médicos, doctores, camilleros, ecógrafos, partera, etcétera”, expresaba Marzol, acompañando el posteo con una foto de la familia unida.
“Soy intensamente feliz. Gracias a todos por los mensajes. Me tomé unos días para estar más conectada con la llegada de mi primer hijo”, aclaró la actriz, quien también contó que si bien Donatello se encontraba perfecto, debía permanecer unos días en neonatología. “Quedará algunos días en neo, siendo que aún no cumplía con todas las semanas de gestación”, ampliaba.
Antes del parto, Marzol le manifestó a su marido lo importante que fue para ella tenerlo a su lado. “Gracias por transitar esta etapa a la par, por cuidarme sin ahogarme, por permitirme ser auténtica con lo que siento. Gracias por darme la posibilidad de haber creado juntos lo más lindo de mi vida y gracias por hacerme tan feliz. Te amo, admiro y respeto todo entero”, remarcó en su cuenta de Instagram.
La pareja se casó el 2 de febrero en una ceremonia íntima, debido a las restricciones por el coronavirus, en la que estuvieron sus padres y los amigos elegidos como testigos, entre los que se encontraba José María Muscari. “Este es el túnel que acá llaman ‘del amor’, pero para mí es el túnel de los últimos instantes de solteros”, expresaba la bailarina en un video que compartió en sus redes sociales, mientras caminaba hacia la sala en donde los esperaba el juez de paz.