En las últimas horas Cinthia Fernández fue duramente criticada en las redes sociales por estar pasando unas vacaciones con sus tres hijas durante semanas escolares. Algunos usuarios también la condenaron porque decidió viajar a Bariloche en plena batalla legal con Matías Defederico por la cuota alimentaria.
Sin embargo, ella utilizó su cuenta de Instagram para despacharse en contra de los que la critican. Además de alegar que podía disfrutar de los beneficios de los canjes, sentenció que ella con su dinero podía hacer lo que quería.
Para sus días lejos de la televisión y acompañada de sus tres sus hijas, la modelo eligió un exclusivo hotel spa de cuatro estrellas ubicado en el centro de la ciudad con playa sobre el Lago Nahuel Huapi.
El establecimiento tiene elegantes habitaciones equipadas con muebles de diseño, wi-fi, frigobar, tv, cofre de seguridad digital y moderno cuarto de baño. En su interior también cuenta con un restaurante con platos típicos de la Patagonia y una enoteca.
Los amenities no quedan atrás: tiene piscina climatizada, gimnasio, hidromasaje, sauna seco, baño finlandés y duchas escocesas. Entre los servicios se incluyen masajes y todo tipo de tratamientos corporales y faciales.
La noche en un departamento similar al de Cinthia Fernández en el hotel spa cuesta alrededor de $90 mil pesos por noche. Ese monto incluye el desayuno y el ingreso a todos los sectores del establecimiento, difundió TN durante el fin de semana.
En sus historias de Instagram, Cinthia mostró que estaba muy contenta en el lugar, en donde no solo disfrutó de tardes de sky con sus hijas, sino que se mostró relajada desayunando en pijama.
Cansada de que algunas seguidoras la acusaran de ser una mala madre por llevar a sus hijas de viaje en época escolar, Cinthia Fernández aclaró que ella se va de vacaciones cuando puede y no cuando otros quieren.
“¿Por qué no se van a cag . . . ? En mi profesión, te vas cuando te dan los días, cuando podés. Muchas veces no se pueden elegir las vacaciones y soy la peor madre del mundo, lo sé y me encanta. Hago lo que puedo. Ocúpense de la educación de sus hijos todas estas manga de resentidas y envidiosas”, disparó molesta.
La panelista televisiva añadió que no se fue de canje, como muchos pensaron: “Me tienen envidia. Les voy a decir que vine acá con la mía, con mi plata. No se la debo a nadie”.
Desde Bariloche, Cinthia aclaró que llega a fin de mes y se puede dar gustos porque se la pasa trabajando. Esto también le valió varias críticas, ya que le preguntaron por qué se ensañó con Matías Defederico si ella está cómoda económicamente. Ante esto, remarcó que peleará por la cuota alimentaria justa para sus hijas, ya que es un derecho de ellas.
“No confundan que reclamar los derechos que a uno le corresponden, es llorar por no llegar a fin de mes. Yo agradezco que tengo siempre mucho trabajo. De última, la que está mal, no soy yo. . . serán otras personas, ¿no? Por no cumplir sus obligaciones. Así que les mando un beso. Resentidas. ¿Dónde están? Así que me voy a disfrutar de otro día de esquí, con la mía”, sostuvo.
Sin embargo, antes de despedirse, publicó dos fotos desde el spa del hotel en el que se alejó. “Exprimiéndolo hasta lo último”, señaló y se lo dedidó a al medio perdiodístico que se refirió a sus gastos en el sur del país.