De ese modo, para intentar frenar un vuelco de los ahorristas al dólar, las tasas <b>subirán del 22,6% a 23,6% en el caso de depósitos de hasta 30 días</b>.
El piso de tasa de interés para plazos fijos por hasta 90 días se elevará al 25 por ciento anual, mientras para plazos mayores la tasa variará de 25,6 a 26,2 por ciento, de acuerdo con el monto de la colocación.
El presidente de la autoridad monetaria, Alejandro Vanoli, también había anunciado que <b>subirá de $350.000 a $1.000.000 el tope para acceder al nuevo rendimiento y ampliará el beneficio a las empresas</b>.
Las <b>modificaciones fueron tomadas por algunos economistas críticos como "insuficientes" y como "parches que no resuelven los problemas de fondo"</b>.
"Subir la tasa de interés para frenar una corrida es de manual, es de ortodoxo, pero es insuficiente", analizó el expresidente del Banco Central Aldo Pignanelli, alineado con el massismo.
Por su parte, otro expresidente del Banco Central, Javier González Fraga, alertó que esa medida es un "paliativo" en medio de la "incertidumbre" de cara a las elecciones presidenciales.
El economista Martín Redrado coincidió en que las medidas "son parches que no resuelven los problemas de fondo" y cuestionó: "Es lamentable que un gobierno que dice que apoya la fuerza productiva termine dándole la mano a las bicicletas financieras".
En tanto, un estudio difundido por el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF) sostuvo que "el crecimiento en los plazos fijos permite al Banco Central colocar Letras y, a la vez, alentar el consumo".
"Se puede apreciar que el aumento nominal en los depósitos a plazo observado desde diciembre de 2014 al 10 de julio de este año ha provisto de liquidez a los bancos para fondear tanto al Central, a través de la esterilización vía Lebacs, como al sector privado, por créditos destinados al consumo", analizó IARAF.
En el estudio, la entidad evaluó que "para el gobierno la liquidez tiene que ir a los bancos y no sesgarse al tipo de cambio ilegal", por lo cual destacó: "Ese es el objetivo clave de aquí hasta las elecciones".
Sin embargo, señaló: "Con una expectativa de devaluación a un año del 30%, será necesario subir más la tasa para desincentivar el pase de plazos fijos a dólares ahorro o dólares ilegales".