"Jugué buen tenis, todo lo que traté de hacer salió bien. Sé que tenemos muchos argentinos, muchos fans aquí, creo que juego mi mejor tenis en el US Open", dijo el argentino tras la victoria que apenas le demandó 65 minutos de juego.
La victoria de Peque fue contundente de principio a fin. Logró quebrar el saque de Sandgren en 5 oportunidades, consiguió un 68% de efectividad con su primer servicio y se llevó el 70% de los puntos que jugó con su saque.
Para el cruce de octavos de final, el argentino ya tiene rival: será un peso pesado, el alemán Alexander Zverev, número 6 del mundo, quien se impuso en tercera ronda por 6-7 (4), 7-6 (4), 6-3, y 7-6 (3) al esloveno Aljaz Bedene, 80 de la ATP.
Schwartzman sigue su camino ascendente. Venía de ganar con solvencia en sus primeras presentaciones, sentenciando ambas con un 6-0 en el tercer set.
Y el futuro, más allá de lo que ocurra la semana próxima, asoma auspicioso. Es que cuando finalice el US Open, desde el 9 de septiembre, Schwartzman alcanzará un hito personal: por primera vez en su carrera será el argentino mejor ubicado en el ranking de la ATP.
El actual número 21 del mundo desplazará a su compatriotas Guido Pella, el 20, y a Juan Martín del Potro, el 16, que debió bajarse del certamen por no estar todavía recuperado de la operación en su rodilla y no pudo defender los puntos obtenidos el año pasado cuando llegó hasta la final.
El Peque además está por cumplir dos años seguidos dentro del top 30. Hasta ahora su mejor marca fue el undécimo escalón de la ATP que alcanzó en junio de 2018.