Sergio Araujo, delantero de Las Palmas, fue condenado a nueve meses de prisión por negarse a un control de alcoholemia cuando fue detenido con su vehículo el pasado 26 de septiembre en la localidad de Ingenio en la Gran Canaria, España.
El Juzgado Penal número 3 de Las Palmas dictó la sentencia en suspenso y no en cumplimiento efectivo debido a que el ex jugador de Boca no tenía antecedentes, aunque no podrá conducir por un periodo de dos años.
La Fiscalía había solicitado 11 meses de cárcel para el atacante con pasado en Tigre, luego de que agentes de tráfico observaran un vehículo detenido, en el que estaba el futbolista.
Se le indicó que el coche no podía estar estacionado en ese lugar, Araujo se puso al volante y lo condujo hasta la rotonda de entrada al barrio de Las Puntillas, en una maniobra que los agentes catalogaron de "sospechosa".
En ese momento volvieron a pararlo y detectaron que emanaba olor a bebida alcohólica, por lo que le ordenaron que se sometiera a una prueba, a la que se negó "rotundamente".
Tras el juicio rápido, el procedimiento pasó a lo Penal. Y en esta última vista, la fiscal Montserrat García reveló que Araujo ya cumplió una sanción por conducir bajo los efectos de la bebida en febrero de 2013.
En esa época, el Juzgado de Instrucción número 19 de Barcelona condenó al jugador, de buena trayectoria en el equipo canario, como autor de un delito de conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas, según el diario La Provincia.
Por ese hecho, Araujo, que jugaba en la filial del FC Barcelona, se quedó sin licencia para conducir por ocho meses -cumplidos el 12 de octubre de ese mismo año-.