A medida que se acerca el Superclásico del próximo sábado, River enfrenta la situación de Maximiliano Meza, la única preocupación en el plantel tras el intenso partido de ida de los cuartos de final de la Copa Libertadores contra Colo-Colo.
Mientras que Matías Kranevitter y Fabricio Bustos se han recuperado de sus golpes, Meza sigue entre algodones y su participación es incierta.
El mediocampista, surgido de Gimnasia y Esgrima La Plata, generó preocupación el martes al resbalarse y permanecer tendido en el césped durante varios minutos. Aunque se levantó y continuó jugando, fue reemplazado por Rodrigo Villagra a los 18 minutos del segundo tiempo. Desde entonces, ha sido evaluado por el cuerpo médico del club, pero aún no está al cien por ciento.
Fuentes del club indican que, debido a su estado físico, es probable que Meza comience el partido desde el banco de suplentes, dejando su lugar a Manuel Lanzini o Franco Mastantuono. Sin embargo, el técnico Marcelo Gallardo busca una convocatoria amplia con la mayoría de los jugadores disponibles para mantener la incertidumbre en el lado de Boca.
El propio Gallardo manifestó su intención de tomar decisiones en las horas previas al encuentro, asegurando que evaluará quiénes están en condiciones de jugar. "Después del sábado tenemos un día menos de recuperación, entonces hay que evaluar bien. Tomaré la decisión en las horas previas al partido", afirmó el entrenador.