Renato Gaúcho hizo ingresar a los 71 minutos a Everton, en sustitución de Michel, que había sido elegido para ocupar el lugar de Arthur, lesionado, una de las estrellas del equipo.
Y Everton solucionó el partido. Recibió la pelota de un saque de banda por la izquierda de Bruno Cortez, se deshizo de dos rivales, Joaquín Martínez y Omar González, y colocó el balón colocado y a media altura.
Pachuca, que jugaba su segunda prolongación en tres días, tras haber ganado en el tiempo extra a Wydad Casablanca el sábado, quedó con diez en el minuto 110 por la segunda amarilla a Víctor Guzmán, y ya no pudo levantar el partido.
De esta forma, Gremio, ganador de la Copa Libertadores a finales de noviembre, jugará el sábado la final en Abu Dabi contra el vencedor de la otra semifinal, que juegan el miércoles Real Madrid y el equipo emiratí Al Jazira.
El conjunto brasileño buscará de esta forma el quinto título para su país en el nuevo formato del Mundial de Clubes.
La última vez que un equipo brasileño, y sudamericano, ganó el torneo Clubes fue en 2012 con Corinthians.
Gremio ya fue campeón mundial en 1983, cuando el formato era de Copa Intercontinental, entre los campeones de Europa y Sudamérica.
Por su parte, Pachuca se quedó sin cumplir el sueño de ofrecer a México la primera final de su historia en el Mundial de Clubes, en trece participaciones de las catorce disputadas.
? Superioridad brasileña en la medular.
Gremio se hizo con el control del balón en los primeros compases, con cinco hombres en el centro del campo que imponían el ritmo al partido.
De este modo, Lucas Barrios tuvo dos aproximaciones buenas para Gremio en ese inicio, mientras Pachuca intentaba sorprender a la contra o con algún disparo lejano, como un intento del japonés Keisuke Honda.
Gremio contaba con el apoyo de las gradas, debido a cientos de brasileños, y tenía más el balón, pero no encontraba huecos.
Cumplida la media hora, Luan dio muestras de su clase con un pase largo al desmarque de Ramiro, que éste no supo concretar.
Pero Pachuca mostraba una solidez defensiva que no había exhibido en el primer partido de cuartos de final contra Wydad.
Sin pasar apuros, controlando sin problemas las acometidas de Gremio, esperaba su oportunidad en un contragolpe.
Y los mexicanos dieron un aviso a los 55 con una contra conducida por Guzmán, que obligó al portero brasileño Marcelo Grohe a lucirse.
Pero Gremio siguió buscando el gol y en el minuto 60 llegó su mejor ocasión con un disparo lejano de Luan, que el portero mexicano Oscar "Conejo" Pérez envió a córner con ayuda de uno de los postes.