El mundo del fútbol está de luto por la pérdida de una leyenda de la selección italiana. Salvatore Toto Schillaci, famoso por sus destacadas actuaciones en el Mundial de Italia 90, falleció a los 59 años. Hace más de una semana, el exdelantero fue hospitalizado en estado grave debido a su lucha contra un cáncer de colon.
Su ingreso se realizó en el área de neumología del Hospital Cívico de la capital siciliana. Semanas atrás, se informó que Schillaci pasó por dos cirugías debido a su enfermedad. Aunque había logrado superar el cáncer hace un año, la enfermedad regresó de forma agresiva, dejándolo en un estado crítico que finalmente condujo a su fallecimiento.
Una de las primeras instituciones en reaccionar a su partida fue el Inter de Milán, equipo en el que Schillaci jugó tras su éxito en la Copa del Mundo. “Hizo soñar a toda una nación durante las Noches Mágicas de Italia ‘90. El FC Internazionale Milano expresa sus condolencias a la familia Schillaci por el fallecimiento de Totó”, manifestaron los Neroazzurros en sus redes sociales.
Un goleador legendario
Los goles de Schillaci en el Mundial de 1990 quedaron grabados en la memoria de una generación de italianos que soñaron con levantar el trofeo en su propio país. El atacante comenzó ese torneo como suplente de Andrea Carnevale, pero fue determinante en su primera aparición, anotando a los cuatro minutos de su ingreso en el partido de fase de grupos contra Austria. Luego, convirtió en los encuentros contra la extinta Checoslovaquia, Uruguay, Irlanda, y en la emocionante semifinal ante Argentina. En esa instancia, las esperanzas italianas se desvanecieron en los penales, donde Sergio Goycochea se erigió como héroe.
Nacido en Palermo el 1 de diciembre de 1964, Salvatore Schillaci dio sus primeros pasos en el fútbol profesional con el club de su ciudad natal, el Palermo. Durante su etapa con los rosaneros, jugó mayormente en la Serie C1, anotando 11 goles en 77 partidos. En 1986, se unió al Messina, donde comenzó a destacar a nivel nacional, anotando 32 goles en 104 partidos en la Serie B y llamando la atención de los grandes clubes.
En 1989, fue fichado por la Juventus. Con el equipo bianconero, ganó la Copa Italia y la Copa UEFA en la temporada 1989-1990, anotando 26 goles en 90 partidos. En 1992, se unió al Inter de Milán, donde tuvo menos éxito, totalizando 11 goles en 30 encuentros durante dos temporadas. Finalmente, en 1994, Toto decidió probar suerte en Japón, jugando para el Júbilo Iwata, donde concluyó su carrera en 1997 con un impresionante registro de 58 goles en 91 partidos.
Legado y vida personal
Toto Schillaci es recordado especialmente por su papel estelar con la selección italiana en el Mundial de 1990, donde se convirtió en leyenda al marcar 6 goles, convirtiéndose en el máximo goleador del torneo y ganándose el cariño de millones de aficionados.
Tras su retiro, Schillaci incursionó en la televisión italiana, participando en diversos programas, incluidos reality shows y programas deportivos. Además, fundó una escuela de fútbol para jóvenes en Palermo, el Centro Deportivo Louis Ribolla, con el propósito de transmitir su pasión por el deporte a las nuevas generaciones.
Estuvo casado en dos ocasiones, primero con Rita Bonaccorso y luego con Barbara Lombardo. De sus relaciones, tuvo tres hijos: Mattia, Nicole y Jessica Schillaci.
