Los números, ciertamente, hablan por sí solos. Porque al duelo con el PSV, el conjunto de Diego Simeone llegó con la chapa más reluciente que nunca: ganó los cuatro partidos disputados con antelación en el Grupo D y en total soledad en la punta de la tabla. Y este miércoles, el Aleti volvió a celebrar. Ya con la clasificación a octavos de final de la Champions League en el bolsillo, el Atlético de Madrid venció sin grandes complicaciones al elenco holandés (fue 2-0) y se consolidó en lo más alto con puntaje ideal a falta de una fecha para el cierre de la fase de grupos.
Los goles del equipo del Cholo los anotaron Kevin Gameiro (buen derechazo pegado al palo) y Antoine Griezmann en el complemento.
El trámite del encuentro no presentó en ningún momento dificultad alguna para el conjunto local. Tanto fue así que el entrenador argentino no tuvo que recurrir a utilizar a dos de sus jugadores que, en situaciones complejas, generalmente aparecen para aportar su cuota ofensiva. Sí: tanto Nico Gaitán como Angel Correa, ambos hombres de Selección, vieron el partido sentados desde el banco de suplentes ya que Simeone optó por no mandarlos a la cancha.
Así, el Atlético de Madrid le sacó seis puntos de diferencia a su escolta, el Bayern Munich, y ya se enfoca en lo que serán los Octavos de Final de la Champions más allá de la jornada que aún resta jugarse por la Fase de Grupos.