Juan Martín del Potro está ansioso, pero entiende que la paciencia debe ser su gran aliada en este momento. No juega un partido de single desde febrero pasado y está a sólo horas de reaparecer en el circuito: lo hará de las 23 (el mediodía en Australia), por la primera rueda del ATP 250 de Sydney (sobre superficie dura; escala previa al primer Grand Slam del año), frente al ucraniano Sergiy Stakhovsky (57°).
Los dolores en la muñeca izquierda operada todavía perduran, "van y vienen", y por ello debe tener mesura, pero naturalmente está feliz de volver a estar dentro del circuito, ese que observó sólo por TV durante muchos meses. "La muñeca duele un poco. Me molesta en algunos momentos cuando golpeo con el revés pero estoy intentando golpear más fuerte porque lo necesito si quiero ganar torneos. Está mucho mejor de lo que estaba hace tres o cuatro semanas y el doctor dice que no puede ponerse peor si juego a un alto nivel, así que soy muy positivo", reconoció el tandilense, actual 135° del tour.
Del Potro todavía no logró golpear el revés de dos manos con máxima potencia y dará ventajas hasta que pueda hacerlo. "Es muy difícil cuando empezás, porque veo a todos los jugadores pegando más duro que yo. He estado entrenando con algunos jugadores y me han ganado muy fácil, pero eso es lo que necesito. Necesito pasar tiempo en la cancha. Necesito pensar en el futuro", dijo. Y añadió, sobre el tiempo de inactividad: "Ha sido horrible ver todos los torneos por la TV y ver como fueron de abiertos los Grand Slams".
Hoy en este mismo certamen, durante la madrugada de hoy, Leo Mayer venció al alemán Benjamin Becker 7-6 (7/3), 6-2.
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