Racing sonríe en la Copa. Es que luego del debut goleador que tuvo contra Táchira, al que venció 5 a 0, necesitaba reafirmar esa actuación de local. Y así lo hizo. El equipo de Diego Cocca le ganó 4 a 1 en Avellaneda al Guaraní, de Paraguay y pisa fuerte en la Libertadores.
La primera parte del primer tiempo fue pareja. Con llegadas de uno y otro lado. Hasta que, hacia la mitad, Racing llegó y llegó. A los 30 minutos Diego Milito perdió una oportunidad única. Quedó solo frente al arquero, eligió el palo más lejano y le pelota no hizo la comba suficiente para entrar. Una lástima.
Pero a los 43 minutos, un contragolpe letal fue más que oportuno para Racing, que aprovechó una barrabasada insólita que hizo el arquero rival tras un gran pelotazo de Gustavo Bou: la pelota se le escurrió entre las manos y a cobrar. Era el primero de la Acadé, y el número 100 del conjunto en la Copa.
En el segundo tiempo hubo suspenso. A los 2 minutos del segundo tiempo Diego Milito cerró un ataque impecable. Un cambio de frente que fue directo a Washington Camacho, el pase a Milito y adentro. Era el 2 a 0.
Pero a los 20 minutos todo se ponía en suspenso. Un disparo de Federico Santander a los 20 minutos le dio vida al Guaraní, que descontaba. Era el 2 a 1.
La alegría paraguaya duró poco. A los 35 minutos Bou metió su segundo tanto y el tercero para la Acadé. Historia liquidada. Pocos minutos después, a los 38, faltaba la frutilla del postre: el hat-trick de Bou, la gran figura académica. Así Racing goléo 4 a 1 y sueña como nunca.