

En la madrugada de este lunes, un hombre murió en una estación de servicio de la ciudad de Córdoba y hay una fuerte denuncia contra el accionar de la Policía que intervino.
Todo sucedió alrededor de las 4 de la mañana en un establecimiento de la esquina de las calles Octavio Pinto y Mariano Castex, en barrio Villa Páez.
El hombre de 39 años, identificado como Guillermo Bustamante, acababa de terminar de trabajar en una panadería e iba camino a su casa, cerca de la estación. Estacionó su Ford Ecosport y pidió que el único playero presente le cargara 10.000 pesos.
Desde ese momento en adelante todo lo que ocurrió es materia de investigación por parte de la Justicia.
El hombre mantuvo una discusión con el empleado de la estación y se negó a pagar lo que debía. Por ese lugar circulaba un patrullero, que observó la situación e intervino.
En ese momento, entró en escena la esposa de la víctima. Al notar que su marido se demoraba, lo llamó y se puso al tanto de lo que estaba sucediendo. Como viven cerca, se acercó a la estación e incluso, según su versión, lo hizo con los 10.000 pesos para pagar el combustible.
En ese lapso de tiempo, la discusión escaló en violencia. La Policía dice que el hombre “se puso muy nervioso” y es por eso que intentaron frenarlo y arrestarlo. La esposa, por su parte, brindó otra versión y apuntó directamente contra el accionar de los oficiales que participaron.
Lo cierto es que minutos después se produjo el fallecimiento del conductor de la Ecosport. Los únicos testigos del episodio fueron el playero, los agentes y la pareja del hombre, que arribó justo a tiempo a la estación.
La declaraciones de la mujer fue tajante y aseguró que a su marido “lo mató la Policía. Estaba en el móvil y del móvil lo sacaron desplomado, lo quisieron reanimar y no pudieron, vino el servicio del 107 y me dijeron que mi marido estaba muerto”, expresó.
“Lo metieron al patrullero entre cuatro o cinco policías mientras él le gritaba que se sentía mal, que lo dejaran y yo les decía que me lo iban a matar, pero no hacían caso. Incluso las femeninas me quisieron detener”, continuó.

“En estado agresivo”
La Policía brindó su versión y defendió el procedimiento realizado en la estación de la calle Octavio Pinto. “Estaba en estado agresivo e intentó agredir al personal policial”, expresó el comisario mayor Cristian Barrios, subdirector general de la fuerza.
Barrios dijo que el playero llamó al 911 porque un conductor no quería pagarle el combustible. Ante la presencia de los uniformados, siempre siguiendo el testimonio oficial del subdirector, el hombre se habría resistido a abonar y “se puso violento con el personal”.
“Lo redujeron, lo esposaron y lo subieron al móvil. Estaba agresivo y quiso golpear al personal. Siguió con esa violencia... incluso se sacó uno de los anillos de las esposas y golpeó el móvil policial”, relató Barrios. Al parecer, el hombre se descompensó dentro del patrullero, lo sacaron e intentaron reanimarlo, sin éxito.
Barrios evitó hacer referencia a la versión de un testigo que indicó que al conductor “lo asfixiaron con una llave”. “Todo eso es materia de investigación, está todo el registro fílmico y la Justicia analizará, también hay que esperar al informe forense para saber cómo murió”, contestó al respecto.
Qué dijo el playero
Después de declarar ante la Justicia, el playero dijo que Bustamante “no estaba en sí, estaba como ido”. Según relató, le pidió 10.000 pesos de nafta Súper y luego de cargarle le pidió que le abonara. “Tenía la plata en mano para pagarme pero no quiso hacerlo, me decía que ya me iba a pagar”, aseguró y siguió: “Miraba los billetes, como que los contaba, los volvía a guardar en el bolsillo. Me preguntó el precio, qué combustible había cargado, si había cerrado bien la tapa”.
Luego de insistirle unas cuatro veces, el playero llamó a un policía que estaba de guardia en el sector y no al 911 “porque no quería que se fuera el cliente sin pagar”. “Los efectivos se presentan y le dicen que estaba en un control policial, que dejara el celular”, siguió. Del otro lado del teléfono estaba la esposa de Bustamante, a quien le dijeron que fuera hasta la estación de servicio de barrio Villa Páez para abonar.
“Cuando le piden a la señora que corte la llamada lo quieren reducir, se pone violento, no se deja agarrar y empieza a gritar que le quieren sacar la plata. Llegan más móviles a colaborar. Cuando ven que no lo pueden reducir entre 4, piden el Duar”, relató el trabajador. Siendo ya varios efectivos, lograron reducir al hombre y lo esposaron.
“Queda un efectivo policial con él atrás. En eso cierran la puerta y el policía se pone a los gritos de que se había sacado las esposas y que le había sacado el cargador del arma no letal”, añadió y continuó: “Abren las puertas y se desmaya”.
Según dijo el playero, vio que “lo reducían, pero no que lo ahorcaban”. “Se notaba que no estaba en sí, pero desconozco si tenía olor a vino”, afirmó y comentó que la mujer quiso entregarle los 10 mil pesos pero la Policía se lo impidió porque el cliente ya estaba detenido.
“Cuando lo vio que estaba desmayado en el piso entró a los gritos que lo habían matado, que lo habían golpeado”, concluyó. (Fuente: El Doce TV)