Avanza la investigación en el crimen de Aralí Vivas, la niña de 8 años asesinada en la localidad cordobesa de Brinkmann, Córdoba. El abuelo reforzó las sospechas que apuntan a que la nena de 8 años fue víctima de abuso sexual y que posiblemente el crimen haya sido para taparlos.
Si bien no está confirmado por la fiscalía de Oscar Gieco, en diálogo con Arriba Córdoba, Omar Rauch aseguró que a su nieta “la violaron y la mataron en ese mismo momento”. Es decir que, según él, ambas situaciones sucedieron de manera consecutiva el pasado viernes a la noche en la casa del horror en Brinkmann.
Vale decir que esta teoría ganó fuerza en las últimas horas. El fiscal a cargo incluso reveló que hay “testimonios de dichos espontáneos” de uno de los imputados, quien afirmó que “era costumbre abusar de esa niña”.
“Lamentablemente es posible que no sabremos cuál de los dos la abusó, pero los dos están implicados... la investigación está casi concluida”, dijo por su lado el abuelo materno de Aralí.
En diálogo con Arriba Córdoba, el abuelo materno de la nena de 8 años se refirió a "fiestas negras" en la casa del horror en Brinkmann. Intentó defender a su hija, que es la madre de la víctima y que se encuentra detenida por el brutal crimen.
Respecto a su hija, que es la madre de la víctima y también está detenida por el asesinato, afirmó que “tenía problemas de adicción pero ya estaba recuperada”. En esa línea, confirmó que la mujer fue sometida a una serie de estudios y pericias de los especialistas antes de que le devuelvan los niños.
El hombre indicó que los nenes “no pasaban hambre” y que “tampoco había droga dando vueltas”. Sin embargo, habló de “fiestas negras” que se realizaban en la vivienda “cuando la madre no estaba”.
En un punto, Omar intentó suavizar las acusaciones contra su hija. Argumentó que ella había viajado el día anterior a Morteros para reclamar por la cuota alimentaria del padre biológico de Aralí.
“El verdadero padre hace un montón de tiempo que no estaba presente... años. El verdadero padre de la nena también tiene problemas”, lanzó. Sin embargo, agregó sobre su hija: “No es culpable pero tampoco es inocente”.
El hombre manifestó que decidió hablar públicamente “para que se limpie el nombre de muchas personas que están ensuciando”. “Hay gente que estuvo antes y después, y no tiene nada que ver”, concluyó. (Eldoce.tv)