Se acaban las temporadas de los jugadores en los clubes, se acaban los amistosos y también las palabras. Gerardo Martino tendrá que afrontar su primera competencia oficial desde que dirige a la Selección y a una semana del puntapié inicial en la Copa América de Chile, probará sus fichas.
No se puede encarar este encuentro sin remarcar las ausencias sensibles de Lionel Messi, Carlos Tevez y Javier Mascherano, quienes junto a Roberto Pereyra (no es considerado titular) definen la Champions League 2014/2015 y se acoplarán cuanto antes al grupo. Los dos hombres del Barça tienen su lugar asegurado en el pizarrón del "Tata", mientras que el "Apache" peleará por su cupo en el ataque con Sergio Agüero y Gonzalo Higuaín, según lo expresado por el estratega rosarino.
De todas maneras, Argentina puede darse el lujo de contar con futbolistas que dan la talla con creces, cuando se registran bajas. Por caso, Ezequiel Lavezzi, Éver Banega y Fernando Gago, los que comenzarán esta noche en el estadio Bicentenario de San Juan. Otro que no estará disponible por el momento es Lucas Biglia, víctima de un esguince ligamentario en su rodilla derecha, que lo puso en duda hasta último momento de cara a los compromisos en territorio trasandino. Tampoco estará Pablo Zabaleta, descartado por un traumatismo en el tobillo derecho. En su lugar iría Facundo Roncaglia.
El sábado que viene, la "Albiceleste" debutará en el Grupo B de la Copa América frente al Paraguay de Ramón Díaz, en La Serena. Más tarde se presentará contra Uruguay en el mismo escenario y cerrará su participación ante Jamaica, en Viña del Mar. El público cuyano se dará el lujo de tener de cerca a las figuras internacionales, justo antes de que atraviesen la Cordillera.
De los 23 convocados por Mauricio Soria en Bolivia, 18 militan en el fútbol local. Hay conocidos como Ronald Raldes y Pablo Escobar, quienes pasaron por Argentina, y Damián Lizio, canterano de River que se nacionalizó. La figura es Marcelo Martins, que tiene ascendencia brasileña y juega en el fútbol chino, pero la gran promesa es Sebastián Gamarra, el "Pirlo boliviano" del Milan de Italia.
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