El 8 de julio, la Bombonera volverá a ver a uno de sus hijos pródigos: Sebastián Battaglia. Si bien las lesiones lo alejaron de las canchas de manera prematura, él logró transformarse en el futbolista más ganador en toda la historia del club. Por tal razón, ese día tendrá su más que merecida despedida.
"No quedan palabras de agradecimientos a todos los presentes y a todos los que apoyan este evento. Mi homenaje será una fiesta para el hincha de Boca porque participarán muchos jugadores que le dieron alegrías. Estoy contento por hacer mi homenaje en La Bombonera, un templo del fútbol mundial", comenzó su relato el León en una conferencia de prensa donde estuvo acompañado por Daniel Angelici, Guillermo Marín y María Eugenia Vidal.
Una de las estrellas que darán el presente será Carlos Tevez. Sin embargo, llamó la atención dos ausencias: las de Juan Román Riquelme y Carlos Bianchi. "Román está más que invitado, pero sabemos que tiene que tener su propio homenaje. No hay ningún problema con él, al contrario", esbozó. El Virrey, por su parte, faltará debido a que no estará en el país durante esa fecha.
"Me vuelven las cosquillas a la panza por volver a entrar en una cancha de fútbol. Está bueno darle un cierre a esta etapa que viví. Siempre dije que Boca es mi casa. Ligado al fútbol siempre voy a estar, pero todo a su debido tiempo", soltó Battaglia, quien, en su momento, sonó para dirigir en algunos equipos de Primera División.
Luego, algo más reflexivo, hizo un balance de su carrera: "Me pongo a pensar y tengo edad para estar dentro de una cancha, pero las lesiones no me dejaron. A medida que va pasando el tiempo, me doy cuenta que soy el jugador más ganador del club. Es impresionante". Además, eligió su mejor momento: "Me quedo con la Copa Libertadores del 2000, porque fue la primera".
Para cerrar, Battaglia le mandó un mensaje a la gente, con cierta indirecta, para que esté presente: "Invito a la gente a que disfrute y a ver esa cancha llena otra vez, porque no es linda verla vacía".