La actividad se llevó a cabo en el Randwick Rugby Club, y consistió en un entrenamiento de intensidad media, con poco contacto físico; una sesión de line out y scrum desarrollada por los forwards, y entrenamiento de destrezas entre los tres cuartos.
<b>"El partido ante Nueva Zelanda ya quedó atrás, ya estamos mirando de cara a lo que va a ser el encuentro contra Australia, metiéndole mucha cabeza. Estamos acostumbrados a este tipo de partidos, con semanas cortas, donde hay un viaje en el medio",</b> dijo Javier Ortega Desio en declaraciones realizadas a ESPN.
Mañana llegará el entrenamiento de alta intensidad, y el entrenador Mario Ledesma comenzará a dar las primeras señales con respecto al equipo que arrancará el partido del sábado.
Más allá del lógico desgaste físico, por el partido ante los All Blacks, el viaje y el cambio de horario, los jugadores no arrastran molestias físicas, que pudieran impedirles estar ante los Wallabies.