Tal como sucedió en los primeros dos partidos de Cuartos de Final (Chile-Uruguay primero y luego Bolivia-Perú), el compromiso entre Argentina y Colombia se planteó con una clara superioridad desde el inicio. La 'Albiceleste' dominó de principió a fin a un seleccionado 'cafetero' que prácticamente no pateó al arco. Sin embargo, los de Martino no pudieron corregir su debilidad en la definición y el tiempo reglamentario se esfumó con el marcador igualado en cero.
Tras esto, la Selección logró doblegar a su adversario luego de una tensionante tanda de penales y se metió entre los cuatro mejores del certamen. Más allá de la felicidad que le causó este desenlace, Lionel Messi no pudo ocultar su fastidio: "Es terrible lo que me cuesta hacer un gol en la Selección, hoy tuve clarísimas y no la pude meter. Lo importante es que el equipo hizo un partidazo y seguimos adelante". Y sobre el final agregó: "Dios quiera que entre".
Luego de esta descarga personal, la Pulga destacó: "Íncreíble, fue el mejor partido de la Copa que hicimos, creamos situaciones por todos lados, ellos no querían saber nada. Contamos con la suerte en los penales que no tuvimos en todo el partido. Fuimos merecedores de ganar este partido. Merecíamos seguir".
Ya al ser consultado por el posible rival, que saldrá del choque entre Brasil y Paraguay, el rosarino aclaró: "Cualquiera, en estos partidos pasa cualquier cosa. Si bien Brasil es lo que es, nosotros a Paraguay no le pudimos ganar. Son todos los partidos muy igualados, nadie te regala nada". Y agregó: "Lo importante es que nosotros ya estamos ahí".
Más tarde, al salir del vestuario, Lio brindó más sensaciones y asumió: "Cuando llegamos a los penales después de haber tenido tantas situaciones claras uno piensa lo peor, el cagazo de quedar eliminados. Obvio que sufrimos, pero valió la pena".