26 anotaciones en la última Premier League lo erigieron como el máximo goleador del interesante certamen y despertaron, una vez más, el interés de todos los equipos del planeta. Es una constante desde que llegó al Manchester City, que las instituciones más acaudaladas se hagan eco de sus actuaciones e intenten apoderarse de su ficha.
Sergio Agüero es la vedette de cada mercado de pases en Europa, pero desde hace varios años que el combinado inglés logra repeler a los interesados y mantenerlo en sus filas. Este período de transferencias parece ser diferente a los anteriores. El Real Madrid, una vez más, va a la carga por el delantero argentino que en estos momentos forma parte de plantel de la Selección que intentará levantar la Copa América en Chile luego de 22 años de sequía.
Tras el triplete del Barcelona, el Merengue está obligado a levantar la vara de rendimientos. Con la billetera abultada como de costumbre (gastaron 101 millones de euros para comprar a Gareth Bale en temporadas pasadas), ya enviaron a emisarios para contactar a los directivos del City. ¿La respuesta? Agüero es intransferible.
Aunque el temor en Inglaterra es que los españoles le ganen de mano y negocien directamente con el atacante para convencerlo. La forma de contrarrestar esa suposición es abrir la inmensa bóveda del jeque árabe Mansour bin Zayed Al-Nahyan, dueño de la institución como así también del New York City de Estados Unidos y el Melbourne City, de Australia.
Según Sport, de España, el magnate le ofreció al Kun un cheque en blanco para que el ex Independiente escoja la cifra que lo haría permanecer en los Ciudadanos, al menos hasta 2019, fecha en que se cumple su contrato. Es considerado un jugador franquicia sobre el que gira el proyecto deportivo de todo el club.
Mientras tanto, en Madrid insistirán con Agüero al no ejecutar la opción de compra del "Chicharito" Hernández (a pesar de que 'Rafa' Benítez prefiere a Álvaro Morata). Por lo pronto, están a punto de sellar el arribo del arquero David De Gea.