El juvenil, de 23 años, superó la revisión médica este jueves y por la noche firmó un vínculo por tres años y medio.
Luego de casi un mes de negociaciones, Boca le compró el 60 por ciento de su pase en 2.700.000 dólares, mientras que Rosario Central conserva el 40 por ciento restante.
Carrizo llega por expreso pedido de Carlos Bianchi, quien ya tiene entrenando consigo a Gonzalo Castellani y a Jonathan Calleri, los otros refuerzos de la institución.
No obstante, por el último de ellos existen algunas diferencias entre All Boys y Boca, dueños de los derechos económicos.
La entidad de Floresta considera que el contrato de transferencia firmado hace algunos meses no es válido y por eso hoy hubo una reunión entre las partes.
Si bien no se llegó a un acuerdo, las charlas marchan por buen camino y se espera que la semana próxima el conflicto se solucione.
Por su parte, Boca aguarda que Niza responda a la última oferta de compra que se hizo por Darío Cvitanich, quien está dispuesto a volver a vestir la camiseta del club.
En tanto, se confirmó que el juvenil de Talleres Cristian Pavón, de 18 años, se convertirá en refuerzo del conjunto de la ribera, que abonará por su pase 14 millones de pesos.
"Ya puedo decir que soy jugador de Boca. Firmé ante el juez la autorización para entrenar y mi declaración para jugar ahí. En las próximas horas viajo a Buenos Aires para rubricar el contrato", declaró el futbolista.
Con su llegada consumada, Boca espera poder reflotar el pase de César Meli, cuya operación es todo una novela debido a que se entrenó durante dos días bajo las órdenes de Bianchi.
Sin embargo, como Pavón no aparecía como parte de pago pese a que ambas dirigencias habían acordado de palabra que así sea, Colón desistió de la operación e intimó a Meli para que se sume a los entrenamientos, algo que no sucedió.
Boca se entrenó en doble turno y se confirmó que mañana disputará su segundo amistoso de pretemporada tras haber empatado ayer frente a la UAI Urquiza.
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