Thuram, hijo del legendario campeón del mundo Lilian Thuram, compartió en una entrevista con DAZN una curiosa anécdota que ocurrió durante la etapa de Messi en el Barcelona. En ese entonces, un joven Marcus, con ansias de unirse a los niños en el campo de entrenamiento de su padre, se encontró con un pequeño problema: no tenía botas adecuadas.
Fue entonces cuando Messi, con tan solo 19 o 20 años, se convirtió en el inesperado héroe del día. "Messi era el único que podía dejarme un par. Yo tenía un 38 de pie, y él un 40-41", recordó Thuram. Pero la generosidad de Messi no se limitó a prestarle las botas; al finalizar el entrenamiento, el joven argentino le regaló las zapatillas a Thuram, marcando un gesto que quedaría grabado en la memoria del francés.
Sin embargo, la historia toma un giro inesperado cuando Thuram confiesa su error infantil. A sus tiernos 10 años, el jugador del Inter admitió que al día siguiente regaló las botas de Messi a un amigo, sin comprender completamente el valor de aquel obsequio. "Me arrepiento todos los días...", lamentó Thuram.
Años después, este episodio curioso cobra nueva relevancia cuando Thuram se encuentra cara a cara con Messi en la final del Mundial de Qatar 2022, convirtiéndose en un rival en uno de los momentos más importantes de su carrera.
Actualmente, Marcus Thuram está demostrando su potencial en el Inter de Milán, formando una peligrosa dupla en el ataque junto a Lautaro Martínez. En una entrevista, Thuram explicó su estilo de juego versátil y su gusto por moverse por todo el frente de ataque, revelando una mentalidad ofensiva y creativa.
Además, Thuram compartió detalles sobre su relación con su padre Lilian Thuram, destacando que, a pesar de la impresionante carrera de su progenitor, aún lo ve como su padre antes que como una leyenda del fútbol. Reveló que su padre sigue siendo estricto y siempre está dispuesto a brindarle consejos para seguir mejorando, incluso después de destacadas actuaciones en el campo de juego.