En Huracán pegó fuerte la derrota ante Vélez que puso fin a una seguidilla de ocho partidos sin derrotas (con seis empates) que mantenía a Huracán expectante y con la ambiciosa meta de pelear por la clasificación a la próxima instancia de la Copa Liga Profesional. De todas formas, el Globo no quiere bajarse y ya le apunta a Boca sabiendo que los equipos que están arriba se enfrentarán entre sí en las tres fechas que restan. Es así que la semana comenzó con grandes noticia, además de por las obvias razones de salud: el entrenador Frank Darío Kudelka, Nicolás Silva y parte del staff volvieron a tomar contacto con el plantel tras dejar atrás el coronavirus.
La PCR de Kudelka, ex estratega de Patronato, había resultado positiva el 3 de marzo, previo al viaje a Rosario para visitar a Newell's. Era su segundo partido al frente del equipo desde su regreso y no pudo estar, como tampoco ante Sarmiento y Vélez (su ayudante Martín Cicotello lo reemplazó). El entrenador no fue a Liniers para terminar de recuperarse, pese a contar con el alta epidemiológica, ya que había transitado la enfermedad con algunos malestares producto de la sintomatología.
También volvió a los trabajos en La Quemita uno de los profes, Ramiro Arbelaíz, mientras que el otro, Mauro Cerutti continúa haciendo reposo al igual que otro de los ayudantes, Mariano Echeverría, cuyo contagio fue detectado la semana pasada junto al del vicepresidente primero, Gustavo Mendelovich. Además, el gerente de fútbol del club, Fernando Salces, retomó sus tareas, al igual que el jefe médico del plantel, el Dr. Fernando Locaso.
Por otro lado, el entrerriano Nicolás Silva también se presentó a entrenar tras recibir el alta. El colombiano José Moya, en tanto, es el único futbolista de Huracán que se mantiene aislado y recuperándose en medio de la segunda ola que azota al país.