Roberto Monserrat, ex jugador y tricampeón con River entre 1996 y 1997, recordó la relación tirante entre el plantel del Millonario y Ramón Díaz, el entrenador del equipo en ese momento.
"Era un tipo creído, pensaba que era el único. Con el paso de los años se dio cuenta de que no fue él quien nos sacó campeones. Se dice que si la relación entre jugadores y DT no es la mejor, se lo puede voltear, pero en ese caso no fue así: teníamos un plantel tremendo y el deseo de ganar cosas y dinero pudo más. Al tiempo lo vimos en la despedida de Ortega y los 25 que estábamos ahí lo incluimos, porque somos grandes personas. Comió con nosotros, cosa que no pasaba antes", contó en una entrevista con Olé.
"Él pensaba que era el mejor de todos y no era así. Si el equipo no te rinde, por más que seas el mejor del mundo, no va. Después se dio cuenta de que el equipo lo que lo llevó a ganar grandes cosas. Nosotros lo hicimos campeón a Ramón. Después de que se fue Francescoli, limpiaba a uno o dos por semana o lo mandaba a Reserva. Al único que no pudo fue al Negro Astrada, al que vendieron a Brasil. Ahí te das cuenta de su forma de ser", agregó.
Por otra parte, el Diablo, quien hoy tiene 51 años, reconoció que todo eso quedó atrás: "Si lo cruzo en estos momentos, le doy un abrazo. Ya se dio cuenta de que con nosotros falló muchísimo".
En esa sintonía, explicó que la unión del plantel fue fundamental. "El jugador quiere ganar títulos, prestigio y plata. Teníamos un grupo espectacular. Tirábamos todos para el mismo lado, ninguno se bajaba y éramos unidos: viniera quien viniera se sumaba automática mente", aseguró.
Por último, afirmó que el Pelado le dejó pocas enseñanzas a nivel profesional y humano. "Si el día de mañana me toca dirigir, no voy a hacer todas esas cosas que me molestaron en mi etapa de jugador", sentenció.