El partido más esperado por el equipo en la antesala del torneo tuvo un demoledor comienzo de Argentina, sacándole total provecho a los puntos en ataques rápidos, pero por sobre todo, defendiendo de una forma excelente, asegurando el rebote (quizás el punto más bajo en toda la AmeriCup) y secando a las tiradoras cafeteras para abrir ventaja de dos dígitos.
El segundo cuarto fue todo de Colombia, rompiendo fácilmente la primera línea albiceleste, agregándole el tiro de Palacio (7 puntos viniendo desde el banco), y borrando por completo a las campeonas sudamericanas que estuvieron cinco minutos sin anotar. Sólo el reingreso de Agostina Burani (un triple y una gran jugada en el poste medio) destrabó la ofensiva Argentina. En un parcial totalmente deslucido y cargado de fallos, Las Gigantes se fueron 30-27 abajo.
El equipo de Leo Costa abrió el segundo tiempo a pura bomba, y defendiendo como lo había hecho en el primer cuarto. Neutralizó a la portentosa Paz en la pintura, no permitió tiros cómodos y se puso al frente con comodidad. Ese nivel no se sostuvo en la manga definitiva, y Colombia lastimó con los rompimientos de Ríos. Las Gigantes tuvieron la chance de ganarlo, pero Delabarba agotó el tiempo en la posesión, y con una bola por jugar, las cafeteras tomaron un triple incómodo y el cotejo se fue a suplementario.
Los cinco extra comenzaron cuesta arriba para una Argentina muy floja en defensa. La enjundia y el descaro de Delabarba le dieron la rebeldía que le faltaba al equipo, entrando abajo por dos a falta de 30´´. "Pepo" González tomó un tiro dificultoso desde media distancia y forzó otro suplementario.
En el último chico primó la anarquía y el desorden. En un caos dominado por los nervios, el resultado estuvo en el aire. Un triple de Mabel Martínez pareció quebrarlo, pero una genialidad de Boquete que terminó en canasta de Burani igualó las acciones. Un robo de la mismísima Martínez decantó en canasta colombiana y a Las Gigantes le quedaron 6 segundos para intentar la épica. Boquete, por caso la mejor tiradora del equipo, no realizó una buena selección de tiro y Argentina cayó por 73 a 71.
El cansancio y el golpe psicológico tendrán que disimularse pronto, cuando la Selección salte al campo nuevamente para buscar el séptimo lugar de la AmeriCup.