"Emprendé con nosotros. Productos de calidad premium para peluquerías y emprendedoras, también uso personal. ¡Listos para que le pongas tu marca!". Así se promocionaba en las redes una organización que vendía alisadores para el pelo con formol, shampoos truchos y otros productos para la cosmética capilar sin autorización en Buenos Aires.
En las publicaciones se ofrecen bidones de "shampoo y acondicionador" a $ 5.000 e "insumos capilares" a $ 12.000 pesos los 10 litros. Esas fueron algunas de las pistas que siguieron los investigadores para revelar la dudosa procedencia de los productos.
Tres allanamientos
La Policía de la Ciudad realizó tres allanamientos en la Ciudad de Buenos Aires y Temperley, partido de Lomas de Zamora, en los que incautaron una gran cantidad de sustancias destinadas a la cosmética capilar.
Los líquidos y cremas estaban envasados en bidones y botellas de plástico identificados con distintas anotaciones "oro", "ali japo", "levanta muerto", "biotina". En algunas se puede leer "formol", una sustancia prohibida por la Anmat para usarse en productos para el alisado del cabello.
Todo estaba almacenado en una precaria propiedad sin ningún tipo de higiene ni medida de seguridad. Incluso había tachos azules de plástico con la leyenda "Shampo Pantene" que adentro contenían líquido blancuzco y sucio.
También se puede ver una botella de gaseosa identificada como "Crema Nivea". Todo se ofrecía para la venta al por mayor con envío a todo el país.
La investigación
La investigación de la División Delitos Tecnológicos Complejos de la Policía de la Ciudad determinó que estas sustancias se producían en dos casas del barrio San José de Temperley, en la provincia de Buenos Aires, y en un inmueble ubicado en la Ciudad. Desde estos lugares se enviaban a todo el país.
Uno de los elementos químicos utilizados era el formol, el cual puede causar daños irreversibles en la salud si no se lo manipula con todas las medidas de precaución.
En las redes sociales, estos productos eran ofrecidos para el cuidado del cabello, aunque no estaban autorizados por Anmat debido a su alto grado de peligrosidad.
El envasado se hacía en dos casas
En los operativos, se confirmó que las casas funcionaban como laboratorio, showroom y local minorista.
Secuestraron grandes cantidades de bidones, frascos y envases con productos químicos y se identificaron a los integrantes de la organización criminal, los cuales fueron imputados por comercialización de sustancias medicinales y mercaderías peligrosas para la salud disimulando su carácter nocivo (artículo 201).
También por adulterar o falsificar de un modo peligroso para la salud, aguas potables o sustancias alimenticias o medicinales destinadas al uso público o al consumo de una colectividad de personas (artículo 200). Ambos delitos están tipificados en el Código Penal.
Fue así como el juzgado penal, contravencional y de faltas 19, a cargo de Agustín Eduardo Riggi y el juzgado de Garantías 6 de Lomas de Zamora libraron las órdenes de allanamiento para las tres sedes que tenía esta organización.
El trabajo de los policías fue realizado con intervención de la Anmat y de la Unidad Fiscal Especializada en Medio Ambiente (Ufema), a cargo del doctor Carlos Rolero Santurián y del Auxiliar Fiscal Ricardo Bomparola.
El peligro del formol en los alisadores de pelo
De acuerdo a lo que publica la Anmat en su web oficial, los productos para alisar el pelo que contienen formol o formaldehido pueden desencadenar efectos nocivos para la salud, tanto del usuario como de la persona que lo aplica, o de quien se encuentre en el ambiente circundante.
Los síntomas van desde náuseas, irritación de la piel, de los ojos y/o de la garganta, hasta la mayor ocurrencia de ciertos tipos de cánceres como el carcinoma nasofaríngeo (cáncer de garganta y nariz) frente a la exposición reiterada. (Clarín)