Según las primeras informaciones, el cónclave entre ambos organismos ha tomado una pausa de 48 horas para luego volver a reunirse el jueves y emitir un pronunciamiento final. Sin embargo, la posición de la Confederación Sudamericana es clara: jugar por lo menos una fecha doble este año y retomar las demás jornadas en 2021.
No obstante, los principales clubes de Europa y el resto del mundo se oponen al reinicio de esta competencia debido a que la pandemia del coronavirus aún sigue con fuerza en Sudamérica. Las fronteras cerradas, restricciones y otros requisitos de los gobiernos de cada país impedirían brindar las facilidades necesarias a los jugadores para llegar sin problemas al llamado de sus selecciones.
Al mismo tiempo, FIFA también "aseguró el cumplimiento de los reglamentos vigentes con relación a la cesión de jugadores por parte de los clubes en favor de las selecciones nacionales". La importancia de esto -que igualmente parece que todavía sigue supeditado a la próxima reunión que Conmebol mantendrá con FIFA el jueves-, radica en que muchos combinados nacionales podrían sufrir una reticencia por parte de los clubes europeos en ceder a los futbolistas en medio de la pandemia de coronavirus, que tiene a Sudamérica como uno de los focos más importantes.
Al respecto, según el comunicado de Conmebol, Infantino "manifestó la voluntad de la FIFA de que todas las selecciones nacionales lleguen en igualdad de condiciones", por lo que queda en claro que la voluntad del organismo más importante del fútbol mundial es que las Eliminatorias se jueguen de la mejor manera posible.