El plantel de Diego Osella está viviendo una semana muy difícil de cara al choque trascendental frente a Boca del próximo viernes. El Sabalero está en zona de descenso directo y acrecentó su situación futbolística tras la durísima caída en el Marcelo Bielsa.
Tras ser goleado en Rosario frente a Newell's, el Ministerio de Seguridad de la Provincia de Santa Fe dispuso la custodia de agentes policiales en el entrenamiento rojinegro para prevenir algún acercamiento de la barrabrava.
Desde el departamento de prensa, informaron que Colón entrenará hasta el jueves en horario matutino y ese mismo día los futbolistas quedarán concentrados en el hotel de Campo a la espera del duelo ante Boca del viernes 21.10 horas, donde el Estadio Brigadier López será una verdadera caldera.