Argentina dio un nuevo paso en el Mundial de básquet: hoy aplastó a Polonia por 91 a 65 y mantiene su marcha perfecta con cinco triunfos en igual cantidad de presentaciones. En cuartos de final, el martes, ya en duelo de eliminación directa se las verá contra el perdedor de Serbia o España, que están jugando ahora.
El equipo dirigido por Sergio Hernández persigue además uno de los dos boletos disponibles para equipos americanos en los Juegos Olímpicos del año próximo. Eso podría concretarse mañana si Estados Unidos supera a Brasil y República Checa hace lo propio contra Grecia.
Hoy la Selección tuvo un notable rendimiento en la pintura como para empezar a sentenciar el juego, ya al cabo los primeros 20 minutos la diferencia en ese rubro era abismal: 30 puntos contra 10. Para eso fueron clave el interminable Luis Scola (21 puntos y 6 rebotes) y Marcos Delía (12 y 5), quienes dominaron los tableros a su antojo.
Con la distancia plasmada en los primeros cuartos, entraron al último con distancia de 29 -70 a 41- el Oveja aprovechó para darle distancia a los jugadores con mayor desgaste a lo largo del certamen y allí los europeos acortaron un poco hasta el 91 a 65 final. Ahora es tiempo de reponer energías y esperar al martes.