"No solo me duele la muñeca, sino la espalda, las piernas? Es un dolor lindo esta vez, es de competencia, de partidos ganados. Es un dolor que extrañaba mucho". Con esas palabras se despidió Juan Martín del Potro del Masters 1000 de París, luego de ser derrotado en cuartos de final por el norteamericano John Isner.
El argentino se fue dolorido pero satisfecho con su temporada: "Estoy triste, pero con el correr de los días voy a tomar dimensión de esta seguidilla que tuve y verme dentro de los 10, 11 o 12 mejores del mundo para mí va a ser fantástico". Estuvo a un partido de sellar su participación en el Torneo de Maestros británico.
Si bien quedó en las puertas del Masters de Londres, podía haberse mantenido como suplente, aunque dejó entrever que su año deportivo terminó con el campeonato francés: "Ahora me voy derecho a Tandil".