El resultado final ya parecía sellado, pero en el fútbol, hasta que suena el silbatazo final, puede ocurrir cualquier cosa. En la ida de las Semifinal del Reducido de la B Nacional entre Instituto y Patronato, el 0 a 0 parecía estar definido, pero dos penales en tiempo de descuento le agregaron un tinte épico al partido.
Los paranaenses en la tarde-noche de Alta Córdoba, llegaron como el equipo mejor posicionado a este reducido, ya que finalizaron en la segunda ubicación del Torneo de la B Nacional detrás del ascendido Atlético Tucumán, mientras que los cordobeses fueron los últimos en meterse en la lucha, al consolidarse en el quinto puesto en la última fecha.
Primero fue Jonatan Bauman quien abrió el tanteador para los locales. Era la gloria del final para los cordobeses, pero los planes de Sebastián Bértoli eran otros. En la jugada siguiente, el arquero capitalizó una nueva pena máxima, esta vez para el Patrón, y anotó el 1 a 1 definitivo.
La definición será el próximo miércoles desde las 21. 30 en el Estadio Presbítero Bartolomé Grella.
En el primer tiempo, ninguno de los dos equipos logró dominar el juego con mucha claridad, aunque fue el Rijinegro quien tuvo la mayor cantidad de aproximaciones al área contraria. De todos modos, la más nítida fue para el conjunto cordobés. Christian Bernardi desperdició una oportunidad inigualable, cuando recibió en el área chica y con el arco vacío no pudo acertarle al arco.
El complemento mantuvo la misma tendencia inicialmente, pero lentamente los dos fueron bajando en intensidad. En los minutos finales, la gloria uto terminó imponiéndose más por un impulso de la localía que por un gran juego y llegó la gran chance del penal.
Un claro agarrón de Diego Martínez desembocó en el tanto de Bauman y la algarabía se apoderó del Estadio Juan Domingo Perón. Pero el partido tenía un capítulo más.
El árbitro Pedro Argañaraz consideró una mano dentro del área local, y la pena máxima fue del gran capitán del Santo. Bértoli se hizo cargo como suele hacerlo y dejó abierta la serie.
El sueño de subir a Primera División ya está en marcha para el elenco de Iván Delfino, y el Presbítero Bartolomé Grella será la siguiente estación de la gran ilusión.
