El plantel Millonario, que arrancará la pretemporada el 22 de junio, apenas podrá trabajar dos semanas de manera intensa ya que el 3 de julio debe jugar ante Rosario Central por Copa Argentina y el 8 de julio ante Tigre en el partido postergado.
El Muñeco Gallardo, que esta tarde partirá de vacaciones a Francia con su familia, tiene el objetivo puesto en las semifinales de la Copa Libertadores ante Guaraní a disputarse el martes 14 de julio en el Monumental y una semana después, en Asunción.
Lo cierto es que si River llega a la final de la Copa, tendrá siete partidos en menos de un mes: el 3 contra Central, el 8 frente a Tigre, el 14 con Guaraní, el 19 ante Temperley, el 21 la revancha ante los paraguayos, el 26 viajará a Rafaela y el 29 jugaría la primera final de la Libertadores.
Además, en la segunda semana de agosto, se programó la final de la Suruga Banka en Japón, lo que implica una semana de viaje y por consiguiente una segura postergación de, al menos, una fecha del torneo local.
Por tales motivos y ante la imposibilidad de trabajar con tiempo en la pretemporada, Gallardo también pidió que se resuelva la semana que viene el tema de los refuerzos para que puedan arrancar con el grupo el 22 de junio.
River regresará al trabajo el lunes 22 de junio y se concentrará en la reserva de los Cardales durante 10 días sin la presencia del uruguayo Carlos Sánchez y el colombiano Teófilo Gutiérrez, que tendrán un permiso especial por estar disputando la Copa América con sus selecciones.