La reconocida publicación deportiva se hizo eco de las sospechas sobre arreglos para determinar el resultado de los partidos durante el Mundial 2002 que se organizó entre Corea del Sur y Japón, tras destaparse el escándalo de corrupción en la FIFA.
"Piloteaban los mundiales!", tituló sin titubeos Il Corriere dello Sport. Allí asegura que "se confirman las sospechas sobre favores en Corea 2002".
De acuerdo a la publicación, los arbitrajes en los encuentros de los coreanos ante italianos y españoles fueron clave para la clasificación de uno de los anfitriones de la cita mundial de 2002.
En el encuentro entre Corea e Italia, el arbitro macó un penal muy cuestionado a favor de los asiáticos, expulsó a Totti y anuló un gol de oro legítimo a Tomassi por un fuera de juego inexistente.
Asimismo, durante el partido ante el seleccionado español, los coreanos recibieron los favores del árbitro egipcio Al-Ghandour y uno de sus asistentes, Michael Ragoonath, que en dos fallos polémicos anularon dos goles a los europeos.