Las manos de Nicolás Angellotti pusieron a Acassuso en los 16avos. de Final de la Copa Argentina. El arquero desniveló la definición por penales a favor de su equipo al contener el último remate de Sebastián Eguren y el conjunto dirigido por Walter Otta dio la sorpresa ante Colón de Santa Fe. Tras el 0 a 0 en los 90 minutos, la alegría fue para el club de la B Metropolitana.
Colón y Acassuso se animaron a atacarse y construyeron un primer tiempo con varias aproximaciones frente a los arcos. Del lado del conjunto santafecino, el destacado fue el joven Gustavo Villarruel, quien complicó a la defensa rival con permanentes desbordes sobre el sector derecho que no pudieron ser capitalizados dentro del área. El equipo dirigido por Walter Otta apostó exclusivamente a la calidad técnica de Gastón Ada, quien se ubicó sobre la izquierda y fue una complicación por su inventiva de tres cuartos de cancha hacia adelante.
Sin embargo, más allá de la diferencia de categoría, fue Acassuso el equipo que más cerca estuvo de ponerse en ventaja durante la etapa inicial. Ada generó un penal ante Luis Castillo, pero Rodrigo Chao, histórico del equipo dirigido por Walter Otta, desperdició el remate al enviarlo violentamente por encima del travesaño. Tras esta acción, Colón se hizo dominador del balón, pero no encontró soluciones ofensivas cuando llegó a la zona de ataque.
Los penales se transformaron en una instancia inevitable luego de que Colón y Acassuso jugaran un complemento en el que dejaron a la luz todas sus limitaciones para generar peligro. Colón no se decidió a ganar el partido y sus intentos sólo se redujeron al esfuerzo permanente de un Cristian García que no tuvo acompañamiento. Acassuso dependió demasiado de un Gastón Ada que mostró categoría de sobra, pero que sufrió una marcada falta de socios en ofensiva. Sin embargo, el enlace fue el gran destacado en la tarde cordobesa al generar peligro con varias acciones; entre ellas, una entrada sobre el sector izquierdo que el futbolista decidió finalizar con un disparo que pasó cerca del arco defendido por Jorge Broun.
La definición desde los doce pasos le hizo un guiño a Acassuso y Nicolás Angellotti fue el héroe de la tarde al contener el último penal ejecutado por el uruguayo Sebastián Eguren. Habían tenido ciento por ciento de efectividad hasta la décima ejecución, cuando el arquero se lució y contuvo el disparo que decretó el final del encuentro. El conjunto de la B Metropolitana hizo historia en la cancha de Instituto y ahora tendrá el privilegio de enfrentar a Vélez.