Jorge Cáceres faltaba de su casa desde el pasado domingo 11 de junio cuando, según sus vecinos, se cayó y se golpeó la cabeza al salir de su casa en el barrio porteño de Once y fue a atenderse en el hospital Ramos Mejía.
En el centro de salud figuraba el ingreso de Cáceres el domingo a las 20.30 y el pedido de una tomografía pero nada más y sus hijas desconocían su paradero hasta este lunes cuando las contactó un gendarme gracias a un particular hallazgo.
"Jorge tenía debajo de un diente postizo un papel con los números de las hijas. El gendarme reconstruyó el papel porque estaba mojado y encontraron el teléfono de una de las hijas", contó en declaraciones televisivas Fátima, amiga de una de las hijas de Jorge.
En cuanto al estado de salud del hombre, dijo que está "golpeado pero lúcido" y que incluso hace chistes y reconoce a la perfección a su familia y amigos.