Gualeguay tuvo lluvias que acumularon 450 milímetros en cuatro días, hasta el mediodía del jueves y siguió lloviendo durante la tarde. Elonce se trasladó hasta la localidad para documentar la magnitud del desastre y recoger testimonios de los afectados.
Tal fue el caso de Víctor, quien rememoró a Elonce cómo fue la inundación de 2007, con la esperanza de que ese desastre no volvería a repetirse. “Hicieron el canal periurbano, pero no está funcionando porque seguimos inundándonos”, advirtió al remarcar que “todo Gualeguay está bajo agua”.
El Barrio Pancho Ramírez, que se erige como uno de los lugares más afectados, Alejandro relató a Elonce: "Yo vine a visitar a mis viejos y el agua les llegó hasta la puerta de la casa, pero tenemos problemas porque el agua ingresa por las cloacas", señaló. La solidaridad entre vecinos se hace evidente, ya que "todos estamos sacando agua", agregó.
Las condiciones para acceder al barrio también se han visto afectadas. En una de las intersecciones, el nivel del agua es considerable, lo que genera dificultades. "Al circular los autos y generar movimiento en el agua que ingresa a través de la vereda a las casas", explicó Alejandro.
“Todo Gualeguay está bajo agua”
"Vamos a custodiar toda la noche porque no podemos dejar la casa sola y estamos alerta al agua porque va a seguir lloviendo", añadió.
Otra residente, Norma, también compartió su experiencia ante la tragedia. "Ya es la segunda vez que nos pasa esto, en el 2007 fue peor, pero estamos a la espera de lo que va a seguir pasando", relató.
"Desde el municipio nos trajeron arena y hasta el momento nosotros no tuvimos pérdidas materiales, igualmente seguimos a la espera porque si nos tienen que evacuar, va a ser muy difícil reponer todo lo que perdamos", explicó Norma.
En otro testimonio desgarrador, Raúl, relató la difícil situación que atraviesa junto a su familia debido a las inundaciones. "Yo me levanté a las nueve de la mañana y empezó a ingresar el agua; poco a poco fui sacando, pero en un momento ya era en vano porque tenía toda el agua encima", explicó.
La escena que describe Raúl de su hogar es desoladora. Los muebles fueron levantados para intentar salvar lo que se pudiera, incluso tuvieron que quitar las puertas de las habitaciones para evitar que se mojaran. "Mi señora me ayudó y levantamos unas cuantas cosas para la planta de arriba de la casa, también levantamos algunos electrodomésticos", agregó.
A pesar de los esfuerzos por proteger sus pertenencias, la incertidumbre persiste. "Estamos esperando si para de llover, pero el agua todavía no baja", comentó. El recuerdo de las inundaciones del 2007 aún está fresco en su memoria. "En aquella ocasión, el agua alcanzó un metro de altura dentro de mi casa, ahora por suerte es menos, pero tenemos que seguir esperando porque va a seguir lloviendo", rememoró.
"Esta situación genera tristeza y amargura"
"Nosotros tenemos dos pisos en la casa y arriba estamos secos, pero lamentablemente hay gente que no y tiene que estar en el agua", lamentó.
Raúl no puede evitar expresar su descontento ante la falta de soluciones a largo plazo por parte de las autoridades. "Esta situación genera tristeza, amargura, porque este problema viene de hace muchos años y los gobiernos no hacen las obras que tienen que hacer", concluyó.