El presidente de Boca, Juan Román Riquelme, salió a explicar públicamente las razones de la presentación de la lista de buena fe para los 16avos de final de la Copa Sudamericana, que dejó afuera a los cuatro flamantes refuerzos (Gary Medel, Tomás Belmonte, Brian Aguirre y Milton Giménez), y argumentó que fue "un temita de horarios" lo que provocó la confusión.
"Hubo un temita con el tema de horarios. Estábamos convencidos de que podíamos presentar la lista a las 20 horas de Argentina y a las 19 de Paraguay y al final era antes. Mandamos el mail a las 19.43 de la tarde. Conmebol se puso estricto", declaró el mandamás del cuadro de la Ribera en la entrada del predio de Ezeiza, mientras el plantel de Diego Martínez emprendía el viaje a Ecuador para enfrentar a Independiente del Valle.
El Xeneize publicó un comunicado en su cuenta de Twitter durante la tarde del lunes en el que anunciaron que "los jugadores Gary Medel, Tomas Belmonte, Brian Aguirre y Milton Giménez no han sido habilitados por una cuestión de diferencia horaria entre los dos países. Por esta razón los cuatro jugadores nombrados no formarán parte del repechaje".
A su vez, el máximo ídolo de la institución boquense deslizó que habló con Diego Martínez, que estaba muy enfadado con lo sucedido según algunas versiones que trascendieron entre las paredes de Brandsen 805, después de la polémica de la lista. "Hablamos cosas normales con el DT. Tiene buena relación con Raúl y Marcelo (Cascini y Delgado, integrantes del Consejo de Fútbol). Estamos bien para el partido", contó.
En este sentido, se mostró optimista respecto de la actuación de un equipo que saldrá a la cancha con 15 bajas en total, entre lesionados, suspendidos (Pol Fernández) y convocados a la Selección Argentina Sub-23 para los Juegos Olímpicos de París 2024 (Zenón, Medina, Equi Fernández y Brey): "Vamos a pensar en el partido que tenemos mañana. Tenemos un buen plantel y creemos que lo haremos de la mejor manera".
A su vez, Riquelme tampoco dejó de lado el hecho de que el equipo ecuatoriano recibirá a su club en un estadio -el Banco Guayaquil- que apenas tiene capacidad para 12.000 espectadores, muy baja si se la compara con las 54.000 almas que puede albergar La Bombonera.
"Mañana tendrá la suerte de conocer Ecuador. Seguramente va a ser un gran partido y tenemos la ilusión de pasar en los 180 minutos. Pero si Conmebol tiene un reglamento tan estricto y el estadio no cumple las normas, deberán ser igual de estrictos con ellos", disparó sin filtro.
De todos modos, desde las entrañas del elenco ecuatoriano confirmaron que su recinto está aprobado por el organismo regulador del fútbol continental. De hecho, argumentan que en ese mismo lugar disputaron el encuentro de ida de la Recopa Sudamericana 2023, frente a Flamengo, que culminó con victoria por 1-0 para los locales. <i>(TyC Sports)</i>
