La Cámara de Diputados de Entre Ríos dio media sanción, a la creación del Régimen de Incentivo a las Nuevas Inversiones (RINI) y la adhesión de la provincia al Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI). La medida fue apoyada por el oficialismo y algunos legisladores libertarios, lo que provocó fuertes críticas de sectores opositores que cuestionan la falta de transparencia y participación en el proceso.
Nadia Burgos, referente del Movimiento Socialista de Trabajadores (MST) en Paraná, expresó su rechazo a estos regímenes en diálogo con Elonce. “Nosotros nos posicionamos en contra del RIGI porque no traerá ningún beneficio para Entre Ríos. No solo desde una perspectiva ambiental, que es fundamental considerar, sino también desde una perspectiva productiva. Preguntamos a los diputados cuántos puestos de trabajo se crearán y cuáles son las inversiones que se atraerán, pero nunca obtuvimos una respuesta clara”, afirmó Burgos.
Asimismo, subrayó la opacidad del proceso de aprobación del RIGI, criticando que el tratamiento de la ley se realizó sin la participación de la ciudadanía ni de los sectores que podrían verse afectados. “El tratamiento del RIGI fue absolutamente cerrado. No hubo participación de la ciudadanía ni de los sectores involucrados. Por eso lo rechazamos de plano y nos movilizamos en la Cámara de Diputados. Vamos a seguir protestando para que el Senado también lo rechace, porque creemos que es posible otro modelo productivo para la provincia, uno que no dependa de las corporaciones y los intereses concentrados”, manifestó la referente.
Limitaciones a la presencia ciudadana en la sesión
La referente del MST denunció las restricciones impuestas a la participación ciudadana durante la sesión legislativa. Según explicó, se les informó que por razones edilicias solo podían ingresar 25 personas al recinto. Sin embargo, al llegar al lugar, descubrieron que asesores, familiares y personas asociadas a los diputados ya habían ocupado los espacios disponibles. “Fuimos cientos de personas las que intentamos ingresar, pero nos encontramos con esta limitación. Las sesiones de Diputados son públicas, y sabían que íbamos a estar presentes. Si realmente existía un riesgo edilicio, podrían haber optado por hacer la sesión en un lugar más adecuado”, criticó Burgos.
“Lo que queda claro es que quisieron votar estas leyes a espaldas de la sociedad y de las organizaciones sociales y ambientales que nos movilizamos. Si realmente fueran positivas, se habría permitido un debate abierto y la participación de todos los sectores”, señaló.
Un modelo productivo en debate
Burgos finalizó destacando la importancia de discutir un modelo productivo alternativo para Entre Ríos, que no dependa exclusivamente de las grandes corporaciones y que incluya una verdadera participación ciudadana. “Es posible construir un modelo que atienda las necesidades de la gente y que respete el medio ambiente. Seguiremos movilizándonos y luchando para que este tipo de leyes no se impongan sin el respaldo de la sociedad”, concluyó.