La obra de saneamiento del Arroyo Las Viejas continúa avanzando a buen ritmo, y se espera que esté finalizada a lo largo de 2025. Este viernes, la intendenta de Paraná, Rosario Romero, realizó una recorrida por los trabajos en curso y destacó la importancia de esta intervención para la ciudad. La obra, que originalmente contaba con financiamiento nacional, fue asumida por la municipalidad, que retomó los trabajos en conjunto con la empresa encargada.
“Hemos considerado como prioritaria esta obra, que ya venía ejecutándose, pero que ahora asumimos desde la municipalidad. La empresa ha mostrado buena voluntad, y hemos retomado la obra con ellos”, afirmó Romero en diálogo con Elonce. La obra está pensada para completarse en 8 meses, aunque la intendenta mencionó que el arroyo es un elemento fundamental para la ciudad y requiere de un tratamiento detallado. "Es muy importante que el arroyo tenga filtros biológicos, como los que se van a instalar. Esta es solo una parte del tratamiento, que se extiende entre las calles Ambrosetti y Solanas", explicó.
La obra también contempla la creación de un paseo lineal que conectará diferentes zonas de la ciudad, mejorando la conectividad urbana. Romero destacó que el saneamiento tendrá un impacto directo en la salud de los vecinos y en el disfrute de la playa del Thompson, un espacio recreativo clave para la comunidad. “Este proyecto también incluye iluminación, parquización y la mejora del acceso, lo que facilitará las caminatas y el disfrute del espacio público. Además, mejorará la conectividad hasta el río Paraná”, agregó.
Por su parte, el secretario municipal de Planificación e Infraestructura, Eduardo Lorefice, resaltó que la obra es integral y tiene un enfoque en la mejora de la calidad de vida de los habitantes. "No solo se está saneando el arroyo, sino que también estamos mejorando los espacios urbanos y públicos. Esto impacta en la playa del Thomson, que es la más emblemática de la ciudad", explicó Lorefice, quien adelantó que la obra estaría concluida para mediados del 2025.
El proceso de saneamiento incluye la implementación de filtros biológicos y físicos para eliminar los residuos más grandes, como botellas y cubiertas, que habitualmente contaminan el arroyo. "Estos filtros ayudarán a reducir la contaminación, y el tratamiento biológico con vegetación permitirá mejorar la calidad del agua que fluye hacia el río", detalló el funcionario.
En cuanto a los vecinos, la intendenta Romero pidió colaboración para evitar la contaminación del arroyo, destacando que, aunque se instalarán filtros y se llevará a cabo un trabajo constante de limpieza, es fundamental la participación de la comunidad para preservar el entorno natural.
La obra de saneamiento no solo beneficia a quienes viven cerca del arroyo, sino a toda la ciudad, mejorando la circulación, la seguridad y el disfrute de uno de los espacios más representativos de Paraná.