La Intendencia de Santiago decretó "preemergencia ambiental" debido a las "malas condiciones de ventilación y con el objeto de resguardar la salud de la población".
Bajo esta preemergencia se restringe desde las 7.30 y por trece horas y media, la circulación de casi un 20% del parque automotor, equivalente a unos 310.000 vehículos, y se paraliza el funcionamiento de miles de industrias.
También se recomienda no realizar actividades deportivas y se prohíbe el encendido de calefactores a leña o biomasa, en pleno invierno austral.
La última preemergencia ambiental se decretó el 4 de julio pasado, durante la final de la Copa América que ganó Chile a Argentina.
A mediados de junio se decretó en Santiago la primera emergencia ambiental en 16 años, en la cual se aplican mayores restricciones aún para la población. (AFP/NA)