Alejada de los medios desde hace tiempo, Viviana Canosa volvió a la luz pública a raíz de una entrevista que le hicieron en el diario uruguayo "El País".
En esa nota, aseguró que por decir lo que pensaba durante el Gobierno anterior, perdió sus dos trabajos pero jura que no se arrepiente.
"Siento que eso me permitió generar con el público un vínculo de verdad, yo no le puedo mentir a la gente y bueno, eso tiene sus consecuencias", reflexionó.
Un costado desconocido
Pero más allá de sus declaraciones políticas y opiniones de actualidad, muchos quedaron sorprendidos con un costado desconocido de su personalidad: "Me fascina la religión. Soy católica apostólica romana y me conecto con lo espiritual, pero cualquier religión me conmueve".
Fue ahí mismo que reveló un curso que hizo durante la pandemia: "Estudié tanatología con una maestra espiritual y me pareció súper interesante. Ella era súper canchera, copada que te habla de lo divino y de lo espiritual desde un luchar cotidiano. Me permite desarrollar mi faceta más altruista y solidaria, poder acompañar a la gente en el camino a la muerte es fuerte. Lo hice además porque durante mucho tiempo le tuve miedo. Ya no".
¿Qué es la tanatología?
Se trata de una disciplina que busca abordar el fenómeno de la muerte en el ser humano en todas sus etapas: desde la pérdida, hasta el sufrimiento psicológico, el dolor físico y las emociones que atraviesan a quien transita ese camino hasta el final.
Para su desarrollo, se sirve de técnicas forenses para tratar de encarar las situaciones que se desatan en torno a ella.
El objetivo, dicen, es sanar el dolor que produce la muerte en el enfermo terminal pero también en su entorno. Sería, en palabras simples, la disciplina 'que ayuda a morir' a las personas. (Pronto)
