

Para la industria automotriz, el anuncio de la salida del cepo cambiario, que entrará en vigencia este lunes, representa un cambio de gran impacto para la operatoria y el financiamiento. La medida pone fin a un proceso que se había iniciado en julio de 2024, cuando el plazo de pago para importaciones se redujo de 180 a 30 días, bajo la administración anterior.
El anuncio fue realizado este viernes por el ministro de Economía, Luis Caputo, en Casa Rosada. Si bien muchos ejecutivos prefirieron esperar unas horas para emitir comunicados formales, desde el sector ya se manifestaron las primeras valoraciones positivas.
Flotación y acceso a divisas para el sector productivo
“El anuncio de las medidas es muy positivo desde todo punto de vista. El cambio de ir a la flotación y que las empresas puedan vender mejor sus exportaciones, en principio, permite además que puedan tener acceso para pagar las importaciones”, indicó una fuente industrial.
El empresario destacó que la eliminación del plazo de 30 días entre el despacho de mercadería y el acceso al pago “facilitará el ingreso de bienes de capital y ayudará a atraer inversiones”. Además, precisó que “lo que queda de deuda se resuelve con los Bopreal”, y resumió: “Se va hacia una operatoria de un país normal y al sector le va a cambiar mucho las condiciones para producir y operar”.

Ford y Toyota también dieron su respaldo
Martín Galdeano, presidente de Ford Argentina y Ford Sudamérica, valoró el contexto general tras el anuncio oficial: “Estamos analizando con detenimiento las medidas anunciadas por el ministro Caputo. Celebramos el acuerdo con el Fondo y creemos que será de gran ayuda para impulsar el crecimiento de la economía argentina”.
“Estamos convencidos de que toda medida que apunte a normalizar el acceso al mercado de cambios es positiva. Junto con las bajas de impuestos de los últimos meses, esto tendrá un impacto favorable en el sector. Más allá de eso, Ford no va a cambiar ninguna condición comercial. No vamos a ajustar los precios, ni frenar facturación, ni acciones de ese tipo”, aseguró Galdeano.
Por su parte, Gustavo Salinas, presidente de Toyota Argentina, expresó: “Celebramos los anuncios del Gobierno en materia cambiaria y la confirmación del rumbo hacia la normalización macroeconómica. Valoramos la decisión de continuar con el desmantelamiento de distorsiones que durante mucho tiempo han dañado a la economía”.
Salinas agregó que “la baja de restricciones para el pago de importaciones y la posibilidad de remitir utilidades son señales muy positivas hacia nuestra casa matriz y para nuestra cadena de valor”.
Impacto entre importadores y mayor competitividad
Desde el sector importador, también hubo reacciones favorables, especialmente por el impacto que genera la unificación cambiaria. Un empresario representante de una marca internacional sin planta en el país explicó: “A nosotros nos viene bien, porque esta semana estuvimos pagando el dólar a $1.360, mientras que los que operaban por el MULC pagaron $1.100. Si todos tenemos el mismo tipo de cambio, vamos a ser más competitivos”.
“El desafío es bueno. Es una excelente noticia. Ahora, con la flotación del dólar, si se va a $1.300, los fabricantes van a tener que decidir si tocan las listas de precios o si reducen su margen”, concluyó.
Las repercusiones anticipan un nuevo escenario para el mercado automotor, donde la previsibilidad en el acceso a divisas será clave para la producción, las inversiones y la estabilidad comercial. (Con información de Infobae)