Universitario de Sucre se presentó el sábado con siete jugadores ante Bolívar por el torneo boliviano, y a los 12 minutos se lesionó uno y terminó el cotejo que ganaba el equipo de La Paz por 2-0. Universitario, por decisión de su director técnico Julio César Baldivieso, llegó de Sucre con siete jugadores, lo mínimo permitido para que un partido sea válido.
Baldivieso decidió respaldar la campaña de Universitario en la Copa Libertadores tras el empate 1-1 del miércoles con Huracán en Buenos Aires, que acrecentó la posibilidad de pasar a octavos de final con un triunfo el próximo martes en Sucre contra Mineros de Venezuela.
Universitario prioriza la Copa Libertadores y solicitó la postergación del partido, pero el pedido fue rechazado por la federación. Por eso, advirtieron que iban a presentar la cantidad justa de futbolistas y lo cumplieron.
"Todo esto es muy triste", comentó el español Xabier Azkargorta que dirige a Bolívar, actual líder del torneo boliviano. El millonario boliviano Marcelo Claure, dueño del club Bolívar, lamentó lo ocurrido en el estadio Hernando Siles, de La Paz. "Es una vergüenza para el fútbol de Bolivia. Me da vergüenza cobrarles a los hinchas que han ido al estadio", escribió en Twitter. Bolívar le terminó ganando a Universitario con goles del español Callejón y el ecuatoriano Tenorio, y cada vez está más cerca del bicampeonato.
Al público de Bolívar le devolverán el valor abonado por sus respectivas entradas. Y claro, fue el partido más corto del mundo.