La picardía futbolera se había adueñado de unos minutos del partido entre Boca y Vélez cuando entre los jóvenes defensores del Fortín, Matías Pérez Acuña y Emiliano Amor, le escondieron la vincha a Daniel Osvaldo como si fueran dos estudiantes de la secundaria. Indignado, el delantero que acaba de quedarse afuera de la nómina de Italia para las Eliminatorias pidió que se la devuelvan.
Habló con uno y con otro. Buscó complicidad en los hombres más experimentados de Vélez, pero no tuvo demasiado éxito. Aquel foul que le habían hecho en tres cuartos de cancha, lo había dejado con dolores y sin sostén para el pelo.
A pesar de que Pérez Acuña manifestó que se la había devuelto y que la cosa había quedado bien con Osvaldo, el accesorio del atacante apareció en las redes sociales en forma de agravio.
El arquero de las inferiores, Facundo Perrone, subió una foto a su Facebook con una vincha y un mensaje lleno de insultos para el delantero: "Vení a buscar la vincha Osvaldito, la perdiste por puto y cagón".