El reconocido golfista Tiger Woods sufrió este martes un grave accidente mientras conducía su auto por la zona de Los Ángeles. Debió ser rescatado por los bomberos y trasladado inmediatamente en ambulancia a un hospital. En estos momentos está siendo operado por múltiples lesiones en sus piernas, según confirmó su agente Mark Steinberg.
El hecho ocurrió en a las 7.12 de la mañana estadounidense en Hawthorne Boulevard, de Ranchos Palos Verdes y aún se desconocen las causas del vuelco. "El vehículo sufrió daños importantes", confirmó mediante un comunicado el Departamento del Sheriff del condado de Los Ángeles, que agregó además que se encontraba solo y debieron sacarlo del coche mediante pinzas hidráulicas.
Tras el rescate, Woods, quien se estaba recuperando de una quinta operación de espalda, fue llevado al hospital más cercano e intervenido de urgencia por múltiples lesiones en sus piernas. Según CNN, el oficial de información pública del departamento policial de Los Ángeles, Henry Narvaez, comentó que las heridas van de "moderadas a críticas". Por otro lado, según el portal de noticias TMZ, desde el departamento de Sheriff de L.A, sostienen que, al menos en un principio, quedó descartada la presencia de alcohol, aunque le realizarán luego más exámenes toxicológicos, publica<i> TyC.</i>
Asimismo, TMZ dio detalles de la mañana antes del accidente. Informó que "Tiger se estaba hospedando en un hotel donde se estaba filmando un importante programa de televisión" y que "cuando el director llegó poco antes de las 7 a.m., conducía su SUV muy rápido cuando salía de la propiedad y casi choca contra el auto del director".
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WOODS, HISTORIA PURA DEL GOLF</b>
Tiger Woods, de 45 años, es uno de los golfistas más exitosos de todos los tiempos. Ganó el Masters en cinco oportunidades, el US Open tres veces, al igual que el British Open, el PGA Championship cuatro y, además, ostenta el récord de 683 semanas en la posición número uno del mundo, desde marzo de 2013 hasta mayo de 2014.
<b>UNA VIDA COLMADA DE PROBLEMAS PERSONALES</b>
Más allá de ser un referente histórico del deporte, la carrera de Woods sufrió varios altibajos, al igual que su vida. En el día de Acción de Gracias del 2002, estrelló su coche contra la entrada de su casa. Su mujer, Elin Nordengren, salió con un palo de golf y comenzó a destrozar su auto porque había descubierto las infidelidades de su esposo, que estaba borracho y drogado.
A partir de ahí, todo comenzó a tambalear. Woods terminó admitiendo los engaños después de que comenzaran a salir un sinfín de historias de chicas contando sus relaciones sexuales con el él. Tiempo después, en conferencia de prensa, pidió perdón y, a través de un reportaje del National Enquirer, afirmó haberse acostado con 121 mujeres diferentes.
Más tarde llegó el divorcio, que rondó los 300 millones de dólares. el retiro anticipado de la actividad y más problemas con las drogas y el alcohol. A eso se le sumaron los problemas en la espalda que lo tienen a maltraer hasta el día de hoy (fue operado cinco veces) y un arresto por conducción temeraria, en la que fue multado económicamente y con 50 horas de trabajo comunitario. Después de 2017, su vida volvió a tomar rumbo y regresó a los campos de golf, donde más allá del paso del tiempo siguió demostrando su notable talento.
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