Las 24 Horas de Le Mans luchó para desarrollar protocolos que permitieran la presencia de aficionados en las gradas del circuito de La Sarthe, aunque finalmente confirmó a través de un comunicado oficial que para esta excepcional edición se disputará a puertas cerradas.
Luego de varias reuniones con las autoridades sanitarias pertinentes, el ACO no pudo llegar a un acuerdo con los protocolos necesarios para habilitar zonas de público.
Ante la situación del COVID-19, que genera incertidumbre todavía, la carrera se disputará el próximo 19 y 20 de septiembre.
"Las 88ª 24 horas de Le Mans pasarán a los anales de la historia ya que, lamentablemente, la carrera de resistencia más grande del mundo se disputará este año sin espectadores en la pista. Durante las últimas semanas, hemos analizado muchas formas en las que podríamos realizar nuestro evento en septiembre con los aficionados presentes, aunque en un número limitado. Sin embargo, dadas las limitaciones que implica la organización de un evento a escala de festival durante varios días en la situación actual, hemos optado con las autoridades del gobierno local para realizar la carrera a puerta cerrada".
"Todavía había demasiados interrogantes sobre la salud y la seguridad. Sabemos que nuestros aficionados estarán tan decepcionados como nosotros por esta decisión, pero, con la salud pública en juego, realmente no fue una decisión difícil de tomar. No se compromete en lo que a seguridad se refiere. Los aficionados no se lo perderán por completo. Puede que no estén en Le Mans, ¡pero nuestros equipos de medios y proveedores de servicios les llevarán Le Mans! Estamos seguros de que podemos contar con el apoyo y la comprensión de todos en este momento", reza el comunicado de los organizadores.